Este curso se basa en la creencia de que la salud es algo que se puede aprender a mantener y mejorar, y que un estado de tensión continuado provoca daños. Además del grupo que comenzó ayer en la biblioteca municipal, también se está impartiendo a un grupo en la residencia de ancianos de la localidad.
En esta tercera edición, el programa pretende, como en las anteriores, acercar a la población herramientas a las que recurrir cuando la tensión se acumule en el organismo provocando ansiedad, problemas musculares y trastornos del sueño, entre muchos más problemas asociados.
De esta manera, se muestran técnicas que resulten a los asistentes útiles y fáciles de realizar. En todo momento, se trata de un taller eminentemente práctico. El mismo lo imparte una fisioterapeuta, Mari Luz Medina, en distintos pueblos de la comarca de la Sierra, como Arcos, Bornos y Prado del Rey. Se realiza un día a la semana en cada población, con una duración de una hora aproximadamente, siempre en horario de mañana.
Los objetivos principales de este curso son, por una parte, crear un marco en el que los mayores puedan expresar y reconocer pensamientos, sentimientos y situaciones de tensión y relajación de su vida cotidiana. Además, la toma de conciencia ante la acumulación de tensión en distintas zonas corporales y cómo afecta al sistema inmunológico y nervioso.
También se pretende ampliar conocimientos con relación a los efectos negativos de la tensión y los beneficios de la relajación, aprender herramientas nuevas para utilizar su potencial creativo en beneficio propio y de otros, así como prevenir futuras tensiones y molestias musculares debidas a situaciones de estrés.
Para ello, las sesiones se dividen en tres partes, técnicas de relajación muscular, dinámicas activa del esquema corporal y visualización.
