Agentes de la Guardia Civil de la patrulla del Seprona de la localidad de Lebrija se ha incautado de 1.400 kilogramos de pescado inmaduro a un vecino de Sanlúcar, lugar de procedencia del percado intervenido.
Los efectivos que se encontraban prestando servicio en la carretera N-IV observaron una furgoneta que se dio a la fuga en dirección a Sevilla, momento que los agentes aprovecharon para ir tras este individuo.
Según informó la Benemérita en un comunicado, los guardias civiles consiguieron interceptar a la furgoneta e inspeccionarla. En su interior encontraron numerosas cajas de boquerones, ante las sospechas de los agentes del Seprona de que no tuvieran las dimensiones reglamentarias procedieron al tallaje de dicho pescado. Los boquerones, una vez tallados tenían una media de cinco y seis centímetros, siendo el tamaño mínimo establecido para su venta en nueve centímetros. Por estos hechos, los efectivos levantaron un acta de aprehensión de la mercancía y además al no llevar ninguna documentación ni etiqueta, lo denunciaron ante la Consejería de Agricultura y Pesca.
Infracciones Del mismo modo, los Guardia Civiles denunciaron al infractor, procedente de Sanlúcar además por cometer dos infracciones de tráfico al hacer caso omiso a la señal de los agentes y también por no haber pasado la ITV a su vehículo. La mercancía ha sido depositada en las dependencia de Mercasevilla y al ser declarada apta pa su consumo fue repartida a los centros benéficos de Sevilla.