El Pleno del Ayuntamiento de Benalmádena (Málaga) ha aprobado de forma provisional una modificación de elementos del PGOU para la fijación de la densidad en suelo urbano y de las condiciones higiénico-sanitarias que deben tener las viviendas en el término municipal.

Esta medida se ha acordado ante la proliferación de infraviviendas en los entornos de Carranque o el Bajondillo, "mediante fórmulas como construir cuatro estudios a partir de una vivienda antigua, o procediendo a un cambio de uso para convertir un local comercial en una vivienda", ha explicado la concejala de Urbanismo, María Isabel Ruiz.

Con esta modificación se intenta poner freno a la infravivienda, además de garantizar el derecho al acceso a una vivienda digna y de calidad. "Para nosotros siempre debe prevalecer la calidad de vida de nuestros vecinos por encima de los intereses de la especulación inmobiliaria", ha valorado la concejala.

Así, se ha establecido un coeficiente único para los núcleos de Arroyo de la Miel y Benalmádena Pueblo de 100 metros cuadrados, y para Benalmádena Costa de 54 metros cuadrados, entiendo que en esta última zona prima la finalidad turística a la residencial.

Al respecto el alcalde, Víctor Navas, ha destacado que Benalmádena "necesita ya que desde el gobierno municipal tengamos claro que modelo de ciudad queremos para el municipio: si queremos seguir creciendo sin fin ni control, o queremos apostar por un desarrollo sostenible de nuestro urbanismo".