En el caso de incluirse junio, sería el octavo estío más cálido en el periodo de referencia (1970-2000) que maneja la Aemet.
Durante la presentación climática del verano, el último balance hídrico y la predicción para el otoño, el portavoz de la Aemet y el jefe de predicción, Ángel Rivera y Fermín Elízaga, respectivamente, han explicado que a pesar de que el otoño entra oficialmente mañana, día 23, realmente lo hará el próximo jueves con el tiempo “típico” de esta estación.
El presente año tendrá un época otoñal con temperaturas algo por encima de los valores medios y lo mismo ocurrirá con el próximo invierno, que será “más suave” de lo normal.
Los valores medios invernales en España -que se sitúan en los 11,6 grados-, registrarán una subida de 0,5 grados por encima de los normal, ha estimado Elizaga.
Este ascenso se dejará notar fundamentalmente en el tercio sur de la península y en Canarias, mientras que en el resto del país no se aprecian “señales significativas”, por lo que las temperaturas probablemente se coloquen en los valores medios.
Además, las lluvias otoñales estarán un poco por debajo de lo normal en el cuadrante sureste y en el interior de la península y no se prevén episodios de lluvias especialmente intensas o temporales.
En cuanto al verano (trimestre de junio a agosto), Rivera lo ha definido como “muy cálido”, algo húmedo y con episodios de tormentas muy fuertes.
En concreto, la temperatura media durante estos tres meses ha sido de 22,3 grados, lo que supone 1,4 grados por encima de lo habitual.
Durante la importante ola de calor de 2003 se registraron tres grados de temperatura por encima de los valores medios, ha añadido Rivera al respecto.
Todos estos datos reflejan que este verano (junio-agosto) se sitúa entre los cinco más cálidos del siglo XXI, el octavo desde 1970 y el primero en caso de no contar el mes de junio.
Según el portavoz de la Aemet, todo esto confirma la tendencia al calentamiento que se observa en el siglo XXI, y coincide con los datos que ofrecen las agencias de meteorología estadounidense y europea.
Sin embargo, ha matizado, aún no se puede afirmar que esto sea consecuencia del cambio climático, “pero sí es verdad que se van acumulando evidencias” en la línea de los escenarios climáticos.
En cuanto a las lluvias caídas durante el verano, el portavoz ha señalado que han sido un poco más abundantes en relación al periodo de referencia (1970-2000), pero “no de forma significativa”: el valor medio del trimestre fue de 95 litros frente a los 83 litros de la serie histórica.
Entre los datos destacados figura el de Aguilar de la Frontera (Córdoba), donde cayeron algo más de 210 litros en 24 horas, la primera vez que se sobrepasa ese registro en esta provincia.
En cuanto al balance hidrológico - del 1 de octubre al 30 de septiembre-, el portavoz ha señalado que ha habido un año húmedo, exactamente un 20 por ciento por encima de los valores medios.
