Tras su divorcio de Sam Mendes, Kate Winslet se embarcó en una relación con el modelo Louis Dowler que parecía hacerla muy feliz, pero ahora dicho romance también ha llegado a su fin. La actriz reconoce que Dowler le ayudó mucho a superar el dolor de su ruptura matrimonial, pero ahora prefiere volar sola para poder centrarse en su carrera y en sus hijos.

Kate Winslet quiere estar sola. Después de su matrimonio fallido con Sam Mendes buscó consuelo en el modelo Louis Dowler, con quien ha pasado los últimos cuatro meses. Pero ahora esta relación también ha terminado y ha sido la propia actriz quien le ha puesto fin: quiere dedicarse a ella misma y a sus dos hijos.

La actriz que debutó con Titanic tiene a su cargo a Joe, de seis años -nacido de su relación con Sam Mendes- y a Mia, de diez años -fruto de un primer matrimonio con Jim Threapleton. Y pese a que reconoce haber sido muy feliz al lado del modelo, sus hijos y su carrera demandan toda su atención en estos momentos.

"Louis era justo el tónico que Kate necesitaba después de su dolorosa ruptura con Sam, y lo han pasado de maravilla", afirman fuentes del diario Daily Mail. "Sin embargo, se han dado cuenta de que su relación no estaba funcionando y Kate necesita espacio para estar sola".

Aunque estos cuatro meses parecen haber dado para mucho, y Kate reconoce lo crucial que ha sido Dowler para recuperar su estabilidad, lo cierto es que su fugaz noviazgo no parece dar para más y ha sido mejor terminarlo antes de que la situación se complicara más.

"Ella está muy agradecida a Louis por ayudarla a recuperar su vida después de que su matrimonio terminara, y ambos lo han pasado muy bien juntos; pero ella sentía que todo había terminado y quiere centrarse en su carrera y sus niños", concluye la fuente.