Según el abogado de la pareja, José Luis Sánchez Calvo, los padres del bebé han rechazado haber cometido el maltrato y han asegurado al juez que desconocen la causa de “los muchos huesos rotos” a lo largo de “todo el cuerpo”.
El juez del juzgado número 9 de Alicante, en funciones de guardia, ha determinado la libertad con cargos, pese a que el fiscal había solicitado la prisión provisional por la gravedad de los hechos.
Los padres, españoles de unos 30 años y vecinos de la pedanía ilicitana de Torrellano, fueron detenidos ayer tras prestar declaración en la comisaría provincial de la Policía Nacional, y han pasado la noche en los calabozos antes de ser puestos a disposición judicial.
Los supuestos malos tratos se remontan al pasado octubre, cuando en una revisión al bebé, un varón que entonces tenía dos meses, el pediatra vio signos de violencia en su cuerpo y dio aviso a los servicios sociales.
El bebé, primer hijo de la pareja, permaneció hospitalizado unos diez días y, a continuación, la Conselleria de Bienestar Social se hizo cargo y lo dio a una familia de acogida, con la que convive desde entonces.
Sin embargo, la Policía Nacional ha recibido información de lo sucedido recientemente y, en ese momento, citó a los padres a la comisaría y los detuvo, lo que ocurrió ayer a mediodía.
El letrado de los padres ha opinado que los informes médicos que apuntan a un supuesto maltrato “son subjetivos” y ha adelantado que su parte solicitará nuevos estudios “para contrarrestar los aportados”.
“Parece ser que los médicos dicen que las lesiones son compatibles con malos tratos”.