En el número 2 de la calle La Gloria, en pleno barrio de Santa María. Allí nació la Tía Norica y allí vive Antonio Aparicio, que junto con otra mujer, se encuentran viviendo en “infravivienda”. La finca se encuentra en muy malas condiciones, con muchas zonas apuntaladas, con filtraciones de agua entre los pisos - una situación que ha sido denunciada ante la Policía Local y Urbanismo-, dice el afectado.
Antonio lleva 20 años viviendo en esa finca, “viviendo en infravivienda”. En 2007, parecía que todo se iba a solucionar con “un acuerdo para la rehabilitación que firmaron el propietario de la vivienda y la Junta de Andalucía”. Pero dicho convenio, según relata el afectado, no llegó a buen puerto.
No obstante, a las personas que vivían en la finca “nos cambiaron los contratos que ahora pasaban a tener una vigencia de 10 años, después de cinco y posteriormente de año en año”.
Según cuenta este hombre, que no tiene recursos y se encuentra pendiente de que le concedan una invalidez, “a partir del día 15 me veré en la calle. La situación es muy incómoda, y más cuando vez cómo en el mismo barrio hay otra gente que consigue casas”.
Según este vecino del número 2 de la calle La Gloria, “al no llegar a ningún acuerdo a los vecinos nos hicieron la puñeta y ahora somos dos los que nos vemos en la calle dentro de unos días”.
Este hombre tiene solicitada una vivienda de una habitación en Procasa, “y tengo una puntuación bastante alta”, por lo cual no entiende que al haber menos solicitudes para casas con una habitación y él contar con bastantes puntos, no tenga respuesta por parte de la empresa municipal. De esta forma, y dentro de su indignación, se cuestiona “si se hace uso del baremo”, de ahí que le pida a la Junta de Andalucía y al Ayuntamiento de Cádiz que “hagan un poco de esfuerzo y miren a quién se le está dando las viviendas, porque hay muchas que se dan a personas a las que no les hace falta”. Como ejemplo ponía personas que han residido en su misma finca.
Las condiciones de la vivienda son cuanto menos indignas. La finca necesita de manera urgente de una rehabilitación, pero este hombre y su vecina no tendrán entonces donde vivir.
