Las plantillas de Alestis en Puerto Real y El Puerto de Santa María, las dos fábricas que la compañía aeronáutica tiene en la bahía de Cádiz, iniciaron este martes la segunda jornada de la huelga indefinida convocada para rechazar el plan de la empresa de despedir a 233 empleados en esta comarca, el 41 por ciento del total contratado. 

A diferencia de la jornada del lunes, los trabajadores no pudieron acceder a los dos puentes que unen Cádiz y Puerto Real y que fueron cortados al tráfico en la primera jornada de la huelga. Y es que cuando tras la protesta a las puertas de la planta de Puerto Real, los manifestantes se dirigían a ambas infraestructuras, se toparon con agentes de la Policía Nacional y de la Guardia Civil de tráfico. Éstos, tras negociar de forma totalmente pacífica con los trabajadores, lograron que se no trasladasen a la CA-35 y la CA-36 y así evitar el corte del tráfico en dos de las tres entradas a la capital gaditana.

El segundo día de huelga indefinida en la empresa aeronáutica Alestis, con sedes en Cádiz y Sevilla, se ha saldado con nuevos incidentes, como cortes de tráfico, quema de neumáticos en forma de barricadas, y encierro de delegados sindicales.

En los centros de Cádiz -en Puerto Real y El Puerto de Santa María- sus trabajadores, unos 560, se han concentrado desde muy temprano en los exteriores de sus fábricas, donde han ardido varias barricadas con ruedas en la rotonda ubicada justo frente a la planta de Puerto Real, lo que ha impedido el acceso al polígono de El Trocadero.

Algunos trabajadores han iniciado una marcha hacia la rotonda que da acceso al puente José León de Carranza, que el día anterior había sido cortado al tráfico, pero la Policía Nacional había dispuesto varios dispositivos antidisturbios, que evitó que los manifestantes volvieran a cortar la CA-35 y la CA-33, lo que hubiese vuelto a provocar intensos atascos en la bahía de Cádiz.

Los participantes en la protesta no han podido continuar y han regresado a los exteriores de la fábrica.

Alestis mantiene su intención de aplicar un ERE que conllevaría 233 despidos, algo que supondría una merma del 41% de la plantilla.
 

“La empresa nos ha venido ofreciendo en los últimos días medidas como prejubilaciones, pero, a cambio de que aceptemos que el resto pueda ser despedido en pésimas condiciones y no lo vamos a permitir”, explicaba a EFE días atrás el secretario general de la sección sindical intercentros en Alestis, Pedro Lloret.


Mañana se celebrará la séptima de las mesas negociadoras planteadas desde que comenzó el conflicto laboral, que viene motivado, principalmente, por la cancelación de pedidos de aviones por parte de las aerolíneas, debido a la crisis del coronavirus.

Alestis planteó el despido de 233 empleados en la bahía de Cádiz, aunque en estas mesas ha ido flexibilizando sus medidas con la oferta de bajas voluntarias con indemnización de 45 días por año trabajado, con tope de 24 mensualidades, y un expediente de regulación temporal de empleo para toda la plantilla de un día a la semana hasta el 30 de junio de 2021.

Pero la parte social ha rechazado esa oferta por entender que a esas medidas se puede acoger solo una parte de la plantilla, y que al resto no se le garantiza ninguna salida digna.


“Lo que tememos es que haya empresas que estén aprovechando la pandemia para reducir costes y desmantelar fábricas, con lo que tememos por el futuro de las plantas de Alestis en la bahía de Cádiz”, ha alertado Pedro Lloret.