En plena calle Larios se instaló una lavadora gigante de cartón en la que de forma figurada se lavan “los trapos sucios” del maltrato para que no queden relegados al ámbito doméstico, según explicó a Efe la directora del Área de Igualdad del Ayuntamiento de Málaga, Gemma del Corral.
Asimismo, se instalaron tendederos en los que se colgaron entre farola y farola de la calle Larios camisetas en las que se narran experiencias tanto de mujeres que han sufrido la violencia machista como de ciudadanos que quieren enviar un mensaje de apoyo a todas las víctimas de los malos tratos.
Esta iniciativa surgió de un grupo de universitarios que elaboraron una campaña bajo el lema de “Hay trapos sucios que no se lavan en casa”, con el objetivo de que la violencia machista se convierta en un problema público y, finalmente, el Ayuntamiento de Málaga decidió convertirla en la campaña oficial para el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer.
Por otro lado, el colegio Rosario Moreno de Málaga también quiso aportar “su granito de arena” a la lucha contra la erradicación de la violencia contra la mujer por lo que construyó un puzzle de 150 piezas para denunciar esta situación.
La profesora Ana Esther González explicó a Efe que los niños más pequeños del centro han dibujado en piezas de puzzle “situaciones negativas por una cara y positivas por otra” y, una vez todas reunidas, se han unido para crear un puzzle gigante contra la violencia machista.
