La Policía Nacional ha detenido en San Roque a un hombre y una mujer como presuntos responsables de una plantación de marihuana ubicada en el interior de una vivienda unifamiliar en Campamento.

Se les considera los presuntos autores de un delito de tráfico de  drogas y defraudación de fluido eléctrico.

En total se han intervenido 60 plantas de cannabis sativa en fase de crecimiento, 12 gramos de hachís e incautado casi 2,5 kilos de cogollos de marihuana envasados al vacío listos para la venta al público.

Según la Policía los cogollos intervenidos eran procedentes de la recolección anterior de la plantación de marihuana, es decir, los investigadores incautaron la primera recolección y consiguieron abortar la segunda producción que los traficantes pretendían cultivar.

Fue en marzo cuando agentes de la Brigada de Policía Judicial de Algeciras tuvieron conocimiento de un cultivo de marihuana “indoor” en San Roque. Por ello comenzaron a realizar todas las gestiones tendentes al total esclarecimiento de los hechos y detener a los responsables del ilícito penal.

Tras más de un mes de numerosas vigilancias se pudo localizar el domicilio que albergaba la plantación ilegal de cannabis sativa e identificar a los responsables del cuidado y mantenimiento de la misma.

Se encontraba en un chalet o vivienda unifamiliar que contaba con un habitáculo independiente y anejo a la misma, dedicado exclusivamente al cultivo ilegal de marihuana.

Dicho habitáculo estaba rodeado de vegetación para dificultar su localización, en lo que la Policía describe como un “auténtico cultivo de guerrilla”.

Además, los investigadores detectaron una defraudación de fluido eléctrico con la finalidad de abastecer el cuidado y mantenimiento de esta plantación, lo que suponía un grave riesgo para la seguridad  tanto de los responsables como del resto de vecinos al tratarse de instalaciones manipuladas que pueden dar lugar a  incendios, ya que la instalación eléctrica estaba muy cercana a vegetación seca.

Según la Policía los cogollos intervenidos eran procedentes de la recolección anterior de la plantación de marihuana, es decir, los investigadores incautaron la primera recolección y consiguieron abortar la segunda producción que el traficante pretendía cultivar.

Además de la droga intervenida y la detención de dos personas, los agentes intervinieron durante el registro 15 bombillas de sodio con sus portalámparas, 15 balastros, un filtro de carbono, dos extractores de aire, un cuadro eléctrico de control además de útiles para el cultivo como fertilizantes.

Una vez finalizado el atestado policial los detenidos fueron puestos a disposición del Juzgado de Instrucción número dos en funciones de guarida en San Roque.