El periodista y escritor Arturo Pérez-Reverte, muy ligado al Campo de Gibraltar y gran conocedor del trabajo de las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado, ha expresado en su perfil de Twitter su pesar por la muerte del funcionario de Vigilancia Aduanera José Luis Domínguez Iborra –“quiero honrar su nombre y apellidos”, señala-, con quien le unió una relación de amistad. “Tenía las agallas de acero”, ha comentado.
“Mal día. Anoche murió mi amigo el observador del helicóptero de Aduanas José Luis Domínguez Iborra (quiero honrar su nombre y apellidos), al estrellarse su helicóptero en el mar, al sur de Sotogrande, durante una persecución a narcotraficantes. Piloto y copiloto sobrevivieron”, ha indicado el célebre escritor.
“Nos conocimos hace treinta y tantos años, cuando hacíamos este reportaje para TVE. Él era el observador de a bordo de otro amigo mío, el legendario piloto Javier Collado. Vi a José Luis muchas veces en acción. Era un buen hombre y un valiente”, añade.
“Un abrazo a la gente de Vigilancia Aduanera. Con todo mi sentimiento”, apostilla el autor, quien ha ambientado su última novela precisamente en la bahía de Algeciras, en una apartado de la II Guerra Mundial.
En posteriores publicaciones en la misma red social, Pérez-Reverte ha ido compartiendo reportajes de televisión y fotos en las que aparece el funcionario fallecido en el accidente de anoche. “En esta fotografía se ve a José Luis Domínguez Iborra, mi amigo el aduanero fallecido, tras saltar desde el helicóptero, en el mar y en plena noche, para evitar que se hundiera una barca cargada de hachís. Él es quien está en la proa de la embarcación. Tenía las agallas de acero”, comenta.