Hubo un tiempo, durante su matrimonio con José Ortega Cano, en el que Ana María Aldón no quería ni oír hablar de 'Sálvame'. La andaluza aseguraba que no tenía intención de colaborar en el programa que más duro ha sido con el torero en los últimos años, y en el que además trabaja no solo Rocío Carrasco sino también algunos de los tertulianos que más beligerantes han sido con el viudo de Rocío Jurado y con Gloria Camila, como Kiko Hernández, María Patiño o Carmen Borrego.
Sin embargo, todo eso cambió en la última edición de la 'Sálvame Fashion Week', en la que coincidiendo con el agravamiento de su crisis con Ortega Cano, Ana María debutó como diseñadora. Lo demás ya es historia... Y a raíz de su separación del maestro, la gaditana ha ido más allá y ha mostrado su lado más artístico en el 'Sálvame Media Fest', cantando, bailando y destapando una atrevida faceta suya hasta ahora desconocida.
¿Será en 2023 cuando se convierta en colaboradora oficial de 'Sálvame'? Por el momento parece que no y que la ex del torero se 'conforma' con su intervención semanal en 'Fiesta', pero lo que sí parece claro es que su relación es cada vez más estrecha con los rostros más populares del programa presentado por Jorge Javier Vázquez y ya comparte momentos de ocio con alguno de ellos.
En esta ocasión hemos visto a Ana María derrochando sonrisas y complicidad con María Patiño, Carmen Borrego, Terelu Campos y Chelo García-Cortés, no solo 'enemigas' de Ortega Cano sino muy cercanas - por lo menos las hijas de Teresa Campos - a Rocío Carrasco. Un encuentro casual en un restaurante de las inmediaciones de Mediaset con el que la andaluza ha presumido de su buena relación con el universo 'Sálvame'; una relación que, es innegable, se ha estrechado a raíz de su separación del torero.