Rafael Nadal, que se metió este miércoles en semifinales de Wimbledon, dijo que no sabe si podrá jugar este viernes el partido contra el australiano Nick Kyrgios.
"No lo sé, no te puedo dar una clara respuesta", respondió al ser preguntado sobre si podrá jugar en semifinales.
"Si te digo algo y mañana cambia, sería un mentiroso. Si ya hubiera decidido algo, no estaría aquí. No haría un show de esto. Si estoy aquí es porque no he tomado una decisión. Tengo que saber diferentes opiniones. Si hay algo más importante que ganar Wimbledon es estar sano. No sé lo que tengo exactamente, es evidente que algo no está bien, pero tengo que seguir haciendo pruebas para determinar hasta qué punto", explicó Nadal.
"(Estoy) preocupado, evidentemente. Sé el dolor que he pasado y hacia el final del partido estaba un pelín mejor porque he encontrado una manera de sacar que me molestaba menos. La cruda realidad es que arrastro estas molestias desde hace una semana, pero hoy han aumentado muy considerablemente. He entrenado poco el saque estos días para reservar", matizó.
Nadal confirmó que su familia le pidió desde la grada que se retirara, pero explicó para él es muy difícil retirarse en la pista central de Wimbledon. "Lo pensé durante un rato largo. Lo he hecho algunas veces y lo odio", subrayó.
"Cuando no es una cosa es otra", prosiguió. "Al menos estas cosas se curan con tiempo, no como el pie, que es algo muy diferente. La realidad es que estamos en semifinales de un Grand Slam con un problema. Al mal tiempo, buena cara", añadió.
Pese a los problemas físicos en el saque, Nadal afirmó que no tiene ninguna molestia cuando pelotea y que durante los primeros juegos, cuando no tenía el dolor, estaba jugando a su mejor nivel en el torneo.
"Si dejamos a un lado los problemas, el nivel de tenis que estoy teniendo con la bola es muy bueno. He jugado a mi mejor nivel desde hace mucho tiempo y a partir del 3-1 he notado algo que iba mal. Estoy preocupado, pero es parte de esto", señaló.
Nadal también explicó que cuando se fue al vestuario en el segundo set recibió unos antiinflamatorios para poder seguir en el encuentro.
"No han podido hacer mucho (los médicos). Me han dado antiinflamatorios. El fisio solo intentó relajar la zona. Nada se puede arreglar cuando tienes un problema ahí. He ganado porque he jugado muy bien desde el fondo, no he ganado por el servicio. He sabido adaptarme a las circunstancias que me ha presentado mi cuerpo", asimiló.