El delantero Álex Alegría, una de las revelaciones del primer tramo de la temporada en el Real Betis tras ser repescado después de su cesión al Numancia, ha renovado su contrato con el club verdiblanco por cuatro campañas, hasta junio de 2021, según informó este sábado la entidad.
El atacante de Plasencia (Cáceres), que el 14 de octubre cumplirá 24 años, terminaba su vinculación contractual con el Betis el próximo junio y, tras haberse convertido en una de las referencias del equipo entrenado por el uruguayo Gustavo Poyet, ha ampliado por cuatro años su relación con el club verdiblanco.
Alexander Alegría llegó al Betis desde el Cacereño, de Segunda B, para enrolarse en el filial verdiblanco en la campaña 2012-13, cuando sólo tenía 19 años.
Pronto se erigió en una de las figuras del Betis B, con el que marcó trece goles en la liga 2014-15, lo que le sirvió para debutar en marzo de 2015 con el primer equipo bético frente al Mirandés, en Segunda División y de la mano del entonces técnico Pepe Mel.
Al final de esa campaña, Alegría amplió su contrato hasta 2017 con el Betis antes de ser cedido al CD Numancia, equipo con el que logró doce goles en la Liga Adelante la pasada temporada.
Tras su regreso el pasado verano al Real Betis, se ha convertido en un fijo en la delantera del conjunto del barrio de Heliópolis, en la que es el escudero del canario Rubén Castro -que precisamente también renovó el pasado viernes, hasta 2019- y lleva dos goles en cinco encuentros en lo que va de liga.
El placentino declaró a los medios del Betis que "ésta es la máxima satisfacción que puede sentir un futbolista" y que siente "un orgullo muy grande" por su renovación, que demuestra que "con esfuerzo y con trabajo en el día a día se puede llegar al primer equipo", pues "aquí está el trabajo de muchos años" tras llegar hace cinco años al filial.
"No ha habido que negociar mucho; fue llegar, mirar el contrato y firmarlo. Cuando se lo comenté a mis padres me dijeron que renovase el mismo día, estábamos todos de acuerdo", aseguró Álex Alegría.
Explicó que no se "lo esperaba tan pronto", pero que "ha surgido así" y por ello está "muy feliz", tras lo que le dio las gracias a la afición y al equipo, además de que cree que "las cosas seguirán yendo bien" si sigue "trabajando así".
Para el cacereño, su compañero Rubén Castro "es un espejo en el que mirarse" y, aunque son "diferentes" y el canario "ha conseguido muchas cosas en este club, ojalá pueda hacer algo parecido", y dijo que su objetivo para este año es seguir contando con la confianza de Poyet y "jugar la mayor cantidad posible de minutos en Primera".
