JFrog, una startup volcada al desarrollo de software ha alcanzado una valoración de más 1 billón de dólares entrando a formar parte de la lista de “unicornios” de Silicon Valley, después de una ronda de financiación de 165 millones de dólares liderada por Insight Ventures, uno de los líderes mundiales de capital privado y de riesgo.
Este nuevo unicornio del Valley ha captado la atención de los inversionistas gracias a un conjunto de productos que introducen la automatización en el desarrollo de software y la implementación de actualizaciones en aplicaciones.
No hay duda de que, ante una sociedad cada vez más digitalizada, conectada y automatizada, el desarrollo de software se hace imprescindible, siendo una profesión cada vez más demandada. Ingenieros de desarrollo y operaciones, también conocidos como DevOps, crean herramientas y aplicaciones que mejoran la productividad de las empresas y satisfacen las necesidades de unos consumidores cada vez más informados, impacientes y exigentes.
JFrog se ha dispuesto a hacer la vida más fácil a los desarrolladores y ha creado una solución universal que les permite no solo aumentar su productividad sino lanzar de manera automática actualizaciones de software, gracias a sus dos principales productos – Artifactory y Bintray.
Este conjunto de herramientas para DevOps fue desarrollado en 2018, en Israel. Su ventaja competitiva está en una innovadora función que permite a los desarrolladores entregar código en forma de binarios e implementar actualizaciones en sus aplicaciones regularmente en segundo plano, lo que significa que no hay que suspender el servicio para permitir la instalación de la nueva versión del software y, por lo tanto, la experiencia de usuario no se ve afectada.
En resumen: Si todos los desarrolladores utilizan los productos de JFrog, los usuarios ya no tendrán que esperar a que se instalen las actualizaciones para poder volver a usar una aplicación. Algo esencial, teniendo en cuenta vivimos en un mundo que cambia y se actualiza constantemente.
Los humanos son cada vez menos necesarios para desarrollar tareas rutinarias y la automatización es clave para la mejora de la productividad y rapidez de cualquier servicio. Los inversores han detectado esta tendencia y han decidido apostar fuerte por ella. JFrog es un ejemplo más de esta tendencia en el campo del desarrollo de software.
También en otros sectores, como el del Marketing, podemos ver una clara tendencia hacia la automatización, ya que permite agilizar procesos y aumentar la productividad de las empresas. Existen plataformas que permiten automatizar el envío de emails, como Mailchimp, o plataformas que permiten optimizar automáticamente tus campañas de Google Ads, como Kolau, entre muchas otras.
Aún está por ver si JFrog será capaz de acelerar su crecimiento y generar unos ingresos que justifiquen esta inversión millonaria. Por el momento, parece que va por buen camino y según Ben Haim, co-fundador y CEO de JFrog, la compañía aspira a hacer posible la entrega de actualizaciones de software en segundo plano en escenarios como el sistema operativo de un Tesla.
