Como SEGURO todos recuerdan, a finales de enero vivimos otro bochornoso espectáculo en nuestra ciudad por culpa de la incapacidad del gobierno de Beardo. Fue antes de la huelga de basuras y después de lo del martillo percutor.Sí, hablo de la falta de seguro obligatorio en los vehículos municipales, un hecho que ni corto ni perezoso nuestro alcalde ha salido a desmentir 2 meses después.

El relato es sencillo.La aseguradora registra en el Ayuntamiento dos reclamaciones de pago por un importe total de 53.371´47€ correspondiente a dos pólizas de seguro y suspensión de las mismas. Me pongo en contacto con la correduría y me confirma que una de las pólizas, la correspondiente a los seguros de 90 vehículos municipales, está anulada y no tiene cobertura desde principios de diciembre.

Seguidamente, solicito informes a la Dirección General de Tráfico donde de manera clara podemos leer “el vehículo no consta como asegurado”. A continuación, hago la denuncia pública de estos hechos en mis redes sociales y prensa. Por otro lado, agentes de la policía local comprueban en su PDA que no tenían seguro, comenzando la inmovilización de los mismos y a sancionar a aquellos que se encontraban en circulación.

Horas después, la concejala de economía, Blanca Merino, corrobora toda esta información declarando: “ante un escrito recibido de Helvetia anunciando el cese del servicio y ante su negativa a devolver las coberturas que habían abandonado, se le remite un escrito exigiendo que se devolviera de manera inmediata la cobertura de seguros para no causar ningún perjuicio en la flota”. En el pleno ordinario de febrero, se niegan a dar declaraciones, se aprueba realizar una Comisión de Investigación, pero por ahora el gobierno se ha negado a convocarla ¿algo que ocultar?

Finalmente, se pagaron las facturas atrasadas y la aseguradora devolvió la cobertura.Un hecho humillante, pero que nuestro alcalde lo vendió como un éxito. Y,dos meses después, sale a desmentir todos estos hechos, sin aportar ninguna prueba, acusando a la policía de denuncias falsas,o sea acusándolos de prevaricación, así como a la oposición y a los medios de comunicación que cubrieron la noticia de NO QUERER A EL PUERTO.

Se le olvidó citar a su concejala, a Helvetia o a la DGT, así como de convocar la Comisión de Investigación o ir a los juzgados a denunciar la conspiración policial. Una más del “modus operandi” de nuestro alcalde.Humo en redes sociales, que alguien se lo creerá. Por suerte para los portuenses, el humo cada vez se disipa más rápido.