El PP desplegará su apoyo parlamentario y territorial para desgastar al socialista Pedro Sánchez si consigue ser investido presidente del Gobierno, ya que podrá utilizar la mayoría absoluta que ha cosechado en el Senado (143 de los 266 senadores) para dar luz verde a comisiones de investigación, al tiempo que tendrá el poder de dilatar los plazos de iniciativas legislativas o de vetar el techo de gasto.
Además, podrá forzar la convocatoria de Conferencias de Presidentes, dado que el reglamento abre esta opción si lo piden al menos diez presidentes. Si en la pasada legislatura el PSOE presidía nueve comunidades frente a las seis del PP, ahora se han cambiado las tornas y los 'populares' disponen ya de 10 autonomías --pueden llegar a 12 si se constituyen los gobiernos de Aragón y Murcia-- con las que Alberto Núñez Feijóo podrá coordinarse para ser "contrapeso" al Ejecutivo de coalición de Pedro Sánchez y sus socios.
"Sánchez va a estar muy acorralado", han indicado fuentes 'populares' a Europa Press, convencidas de que si logra que la legislatura eche a andar, será "muy corta" ante la "debilidad" de un jefe del Ejecutivo que tendrá que negociar con varios socios y que se encontrará con una dura oposición del PP.
Cuando una ley es aprobada en el Congreso, se remite al Senado para ser validada, modificada o vetada. Con su mayoría absoluta en el Senado, el Grupo Popular de Feijóo podrá poner en un brete a un Ejecutivo de Sánchez, dado que podrán retrasar la tramitación de leyes.
Además, tendrá más cupo para registrar preguntas al Gobierno en las sesiones de control, al tiempo que podrá reprobar a los ministros de Sánchez con su mayoría absoluta, un mecanismo parlamentario que los grupos de la oposición utilizan sobre todo en el Congreso.
Pero una de las principales bazas del PP si Sánchez gobierna, una vez constituidas las Cortes, será la posibilidad de dar luz verde a comisiones de investigación en el Senado, gracias a la mayoría con la que contará en la Mesa de la Cámara.
En esta legislatura, el PP no disponía de ese poder y, por ejemplo, la mayoría que tenían PSOE y PNV en la Mesa del Senado decidió no admitir a trámite la solicitud del PP para crear una comisión de investigación parlamentaria en la Cámara Alta sobre presuntas irregularidades del PSPV en el marco del llamado 'caso Azud'. Su intención entonces era que el que fuera presidente de la Generalitat y secretario general de los socialistas valencianos, Ximo Puig, fuera el primero en comparecer.
Otro de los aspectos donde el PP puede volcar su poder territorial es en la Conferencia de Presidentes, ya que con este nuevo mapa autonómico tiene la capacidad de forzar a convocar este órgano entre el jefe del Ejecutivo y los mandatarios regionales.
Con la nueva reforma del Reglamento de la Conferencia de Presidentes, este órgano multilateral no tiene porque ser convocado únicamente por el jefe del Ejecutivo, sino que los presidentes autonómicos, siempre y cuando sean al menos diez, también pueden forzar una reunión.
En este contexto, el PP podría hacer valer su poder territorial, ya que gobierna en al menos diez de estas regiones --pueden llegar a ser doce si suman Aragón y Murcia-- para forzar estas convocatorias al margen del presidente del Gobierno.
Pero el PP no solo tendrá la posibilidad de convocarla, sino también de influir en lo que se hable dentro de esta Conferencia de Presidentes, ya que el Senado, donde los 'populares' tienen mayoría absoluta, tiene la capacidad para incluir asuntos en el orden del día.
También es una de las novedades que se actualizaron en la nueva reforma del Reglamento de la Conferencia de Presidentes, donde se incluyó al Senado como una de las instituciones que podía incluir asuntos en este orden del día, junto al jefe del Ejecutivo, la mayoría de los representantes del conjunto de las comunidades autónomas y las Conferencias Sectoriales.
En las filas del PP ponen el foco en el poder que da a Feijóo tener mayoría absoluta en el Senado en medio del debate sobre el referéndum que piden Junts y ERC para apoyar a Sánchez. De hecho, en 2017, el Gobierno de Mariano Rajoy decidió aplicar el artículo 155 de la Constitución y tomar el control de la Generalitat, un paso en el que fue clave el papel de los senadores.
Esta misma semana, el exministro Federico Trillo, que ha ejercido como letrado superior del Consejo de Estado, ya avisaba desde Murcia que "Bildu, ERC, Junts y PNV deben saber que quien tiene la llave de los referéndums es Feijóo con su mayoría absoluta en el Senado".
"Que Otegi, Rufián y compañía jueguen a engañar a su electorado todo lo que quieran, pero quien tiene el control de la aplicación del artículo 155 es el Senado, y en el Senado quien tiene la mayoría absoluta es Feijóo", recordó Trillo, quien advirtió además de que si Sánchez pacta con un prófugo de la Justicia como Carles Puigdemont puede incurrir en responsabilidades penales.