Judicial Watch --un grupo que se autodefine como conservador y que se encarga de controlar al Gobierno-- había solicitado a través de los tribunales que el Departamento de Defensa y la CIA publicaran las fotografías y vídeos sobre la operación que acabó con la vida de Bin Laden.
El Pentágono asegura que no posee imágenes de la operación, mientras que los servicios de Inteligencia han admitido que poseen 52 grabaciones, pero han rehusado sacarlas a la luz amparándose en las excepciones a la Ley de Libertad de Información contempladas en la propia norma.
El juez federal James Boasberg se ha negado a autorizar la publicación. "Una imagen vale más que mil palabras, pero, en este caso, las descripciones verbales de la muerte y el entierro de Usama bin Laden tendrán que ser suficientes porque este tribunal no ordenará la publicación de nada más", ha sentenciado.
Boasberg ha argumentado que no cree conveniente sustituir el criterio del Departamento de Defensa y de la CIA por el suyo en cuestiones de seguridad nacional.