El biólogo y coordinador de proyecto de la Fundación Oso Pardo, Fernando Ballesteros, opina que los incendios que ya han devastado más de 11.000 hectáreas en la zona de O Courel (Galicia) alejarán a los ejemplares de esta especie de “zonas de interés”, porque se están quemando “hábitats” de alto valor.
En declaraciones a EFE, precisó que “el oso pardo está en estos territorios de Lugo y en Ourense en una situación de expansión”, pero los incendios que han arrasado miles de hectáreas han “afectado a hábitats de mucho interés para esta especie y de gran potencial para el futuro”.
“Se están quemando zonas de alto valor ecológico para el oso”, explicó Ballesteros. De hecho, el fuego ha afectado “a alguna de las plantaciones de árboles frutales” que la propia Fundación Oso Pardo había promovido en la zona para aportar alimentos a los ejemplares de esta especie.
Ballesteros precisó que el oso “no sufre tanto” el efecto de los incendios como “otras especies, porque tiene una gran capacidad para desplazarse, una gran movilidad, pero el impacto sobre los hábitats” que podría ocupar en O Courel es “notable”, lo que podría alejarlo de las actuales “zonas de interés”.
“No es positivo para la especie”, añadió, pero también reconoció que es “peor para la naturaleza” y para “la gente vive allí”. Lo que está sucediendo “es un poco dramático”, concluyó.