El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, ha evitado opinar este lunes sobre "el envoltorio publicitario" de la caja en la que llegaron las vacunas a España y ha asegurado que le interesa "muchísimo más la prioridad y la entrega rigurosa" de las vacunas a las comunidades.
Tras reunirse con el presidente electo de la Comisión de Coordinación y Desarrollo Regional del Norte (CCDR-N), António Cunha, Núñez Feijóo ha reclamado que la entrega de vacunas a las autonomías se haga en función de la población de la tercera edad de cada una de ellas y no sobre la población total.
Para el presidente gallego este aspecto debería ser "incuestionable" y ha añadido que "ética y moralmente no sería justificable que se mandasen dosis a las comunidades en función de determinados colores políticos o de necesidades parlamentarias" del Gobierno.
"Aquí no se vacuna con criterios políticos, sino sanitarios", ha insistido Núñez Feijóo, que ha destacado que este criterio "científico" no debería ser discutido, por lo que Galicia incidirá en él en la reunión del Consejo Interterritorial de Salud de esta tarde.
Sobre el inicio de la vacunación en Galicia ha señalado que la comunidad demostró que está "logísticamente preparada" y ha reclamado "vacunas" para poder seguir con la inmunización de la población más vulnerable, los usuarios de residencias de la tercera edad y sus trabajadores.
Además, ha mostrado su confianza en que en la reunión de esta tarde se pueda concretar que "no habrá ruptura" en el suministro, como ha sucedido este lunes, si bien ha dicho que comprende que no ha sido por culpa del Gobierno, sino de la empresa que proporciona la vacuna.
En cualquier caso ha pedido que el Gobierno sea "prudente" a la hora de concretar entrega de dosis para "no quebrar la confianza" de los ciudadanos.
Respecto a las medidas para Fin de Año, Núñez Feijóo ha recordado que será el comité clínico, que se reúne esta tarde, el que analice los datos de los últimos días y haga una propuesta que la Xunta respetará.
En cualquier caso ha dicho que esta mañana le han pasado datos de la situación entre el 18 y el 22 de diciembre y la tendencia es a un estancamiento, con algunas ciudades con ligeras mejorías y otra con un ligero empeoramiento.
No han sido analizados, todavía, los días entre el 23 y el 25 de diciembre, en los que la Xunta permitió la movilidad por toda la comunidad por razones de reencuentros familiares.
De todos modos ha insistido en que no será un final de año "normal", en cuanto a reuniones, horarios o movilidad, sino que se tendrá en cuenta la situación de pandemia.
"De momento estamos razonablemente satisfechos con la evolución de los últimos días (si haber analizado aún los festivos), a ver cómo acabamos el 7 de enero todas estas fiestas", ha concluido.