Tras la comparecencia de agentes sociales, municipios y afectados sobre la Proposición de Ley de regadíos en los municipios al norte de la Corona Forestal de Doñana y la división en las posturas escuchadas, el día después ha sido el de la reflexión y las reacciones, y la postura predominante ha sido la de la llamada al diálogo.
De un lado, los portavoces parlamentarios de PP y Cs han asegurado este miércoles que están abiertos al diálogo y a la aportación del resto de grupos para solventar el problema con los agricultores del entorno de Doñana y han garantizado que la Junta de Andalucía trabajará por proteger al Parque Nacional.
El portavoz del PP, José Antonio Nieto, ha dicho que la comparecencia de los agentes sociales ha demostrado que hay visiones diferentes “de una misma realidad” y que el problema de Doñana no aparece con la Proposición de Ley (de PP, Cs y Vox.
También ha defendido que se dijo “unánimemente” que la solución pasa por eliminar la presión en los acuíferos a través del trasvase de agua superficial y ha considerado que se ha quitado “la careta” sobre los bulos en torno a la iniciativa con la que se ha querido “convencer de que el problema se crea ahora” y hacer una presión “irresponsable” sobre la comercialización de los frutos rojos.
Nieto ha dicho que son conscientes de la complejidad del problema y que están abiertos a la aportación de todos los partidos.
Y recogiendo ese guante, la portavoz adjunta del PSOE-A, María Márquez, ha instado al Gobierno andaluz a abandonar la “confrontación” y a reconducir la tramitación de la nueva regulación de los regadíos en el entorno de Doñana para buscar una solución consensuada con todas las partes.
Para reconducir la situación generada por la proposición de ley de PP, Cs y Vox, los socialistas han solicitado que se prorroguen los plazos de esta iniciativa, que se tramita por urgencia en el Parlamento de Andalucía, así como la convocatoria de Consejo de Participación de Doñana.
El PSOE-A, que se abstuvo en la votación del nuevo plan de regadíos, se ha reafirmado en idea de que en el territorio “hay un problema, casos de agricultores que hay que estudiar y que merecen de nuestra sensibilidad y de poder encontrar una solución acordada entre todos”, ha esgrimido Márquez en rueda de prensa.
Lejos del diálogo y con su postura muy clara, el grupo Unidas Podemos por Andalucía ha comunicado este miércoles que va a solicitar de modo “formal” la “paralización de la tramitación” de la proposición de ley tanto al Parlamento como al presidente de la Junta, Juanma Moreno, a quien le ha remitido un escrito.
