El panorama sanitario en los centros hospitalarios y de salud de la capital está siendo “muy complejo” durante la época estival y a lo largo un mes de agosto embrollado debido a la falta de personal sanitario, el cierre de plantas en los hospitales, la habilitación de camas X, y la ausencia de artículos de primera necesidad para garantizar una asistencia de calidad a los pacientes ingresados. Así lo denuncian desde el Sindicato Médico, desde CSI-F, Comisiones Obreras y UGT.
Desde el Sindicato Médico confirman que las urgencias del Complejo han estado “colapsadas” por los recortes en los servicios sanitarios de atención urgente de los centros de salud y del servicio de cuidados críticos y urgencias del centro hospitalario.
Por otra parte, desde principios del mes de agosto, el traslado de pacientes que ofrecía el Complejo Hospitalario quedó eliminado, suprimiéndose así esa Unidad, en la que trabajaban 30 profesionales, y realizándose por una empresa privada. “Los recortes en Sanidad conducen a un deterioro de la calidad asistencial, a imprevisibles consecuencias”, asegura el presidente del sector de Sanidad de CSI-F, Juan de la Cruz.
Una de las consecuencias acontecidas este verano ha sido la suspensión de tratamientos para 21 enfermos de cáncer de vejiga, por la falta de un fármaco. El director-gerente del Complejo Hospitalario ha aclarado que los pacientes “van recibiendo el tratamiento”, si bien “se está priorizando” ante las dificultades de abastecimiento de éste.
Por otra parte, la falta de limpieza en áreas hospitalarias ya son evidentes ante la falta de personal. La secretaria de Relaciones Laborales de Comisiones Obreras, Ana Mª Herrera, ha anunciado que movilizará a las limpiadoras del Complejo ante la reducción de la plantilla en un 10% por la empresa concesionaria, Pilsa. Desde CCOO denuncian que “con menos personal se quiere aumentar la jornada laboral”. Los meses de julio y agosto han transcurrido con un 50% menos de la plantilla de trabajadoras, por lo que “hay zonas del Complejo Hospitalario en los que la limpieza diaria no se hace”.
Por otra parte, la seguridad, aseguran, “no está garantizada”. Esto es así debido a la reducción de vigilantes de seguridad en las instalaciones del Complejo. De cuatro trabajadores por turnos se ha pasado a dos para los cinco edificios del hospital central. El Doctor Sagaz y el Neurotraumatológico están “bajo mínimos”. El 24 de agosto se produjo un incendio en el edificio de suministros y “no se pudo garantizar la seguridad de los dos vigilantes ni del resto de personal”.
Desde UGT denuncian que el Complejo no cuenta con un plan de emergencia y evacuación y Gerencia dice que sí y que funciona.
