La Guardia Civil de Jaén conmemoró ayer el 171 aniversario de la creación de una institución que ha contribuido al mantenimiento de unos índices delincuenciales bastante bajos en la provincia. Así lo confirmó el teniente coronel Luis Ortega, que calificó la situación de la provincia como “bastante óptima".
Se refirió a unos "índices delincuenciales bastante bajos". Y es que, mientras que en el resto de España la tasa ronda el 44 por mil delitos, la provincia de Jaén está por debajo de 27 por mil.
Con una plantilla al 88%, Ortega destacó la labor de los agentes en el territorio jienense. Con respecto a los cuarteles, Ortega aludió a una situación "normalizada" gracias a que "durante unos años" ha habido "una gran inversión", si bien es "cierto que ahora, este último año, la inversión se ha reducido bastante".
Espera que en próximos capítulos presupuestarios puedan acometer algunas obras.
Durante el acto se concedió la Cruz de la Orden del Mérito de la Guardia Civil, con distintivo Blanco as los guardias civiles Manuel Moral, Juan Pedro Rojas, Manuel Calvo, Miguel López y Pedro Salas, debido a su pase a la Reserva y “por su intachable trayectoria” en el Cuerpo.
El mismo reconocimiento recibieron el teniente comandante del Puesto Principal de Bailén, Ignacio Rubiera; el sargento comandante de Puesto de Pozo Alcón, Tíscar Navarrete, y el cabo primero Lara Aguayo.
Al acto acudieron el subdelegado del Gobierno, Juan Lillo; la delegada de la Junta, Purificación Gálvez; el diputado en funciones Ángel Vera y el alcalde de Jaén en funciones, José Enrique Fernández de Moya.
