Debe ser que para el actual equipo de Gobierno del PP hay trabajadores de primera y de segunda. Tanto al alcalde como al concejal de Personal y Comunicación, José Enrique Fernández de Moya y Miguel Contreras, respectivamente, se les ha llenado la boca en los últimos años, y especialmente en los últimos meses, al pronunciarse sobre las plantillas de Somucisa (Onda Jaén) y Epassa, recordando que su prioridad es defender los puestos de trabajo de ambas sociedades municipales. No sucedió lo mismo con los trabajadores de Imesapi a los que no se les subrogaron sus contratos con la nueva concesión administrativa, a pesar de habérselo prometido en una reunión el mismo alcalde. Tampoco sucedió así con los de la Estación de Autobuses. Por su puesto, nada fue ilegal, faltaría más, pero todos ellos fueron a la calle y ni sus empresas ni el Ayuntamiento movieron un dedo. Ahora, después de cinco años esperando el pliego de condiciones para renovar el servicio de recogida de basura nos encontramos con que el primero que se elaboró no era más que papel mojado. Según el PSOE, de los 12 millones de euros se eleva a los 15 (actualmente ronda los  16 millones); aunque se sigue eliminando un día de recogida, el domingo, y se echa a 65 empleados. Que sí, que será la empresa concesionaria quien los eche, pero con la clara connivencia del gobierno local.