La operación, bautizada como Sable, comenzó a finales del pasado agosto, cuando guardias civiles del Equipo de Delincuencia Organizada y Antidroga (EDOA) tuvieron conocimiento de que una organización de narcotraficantes se dedicaba a transportar pequeñas cantidades de droga en barcos de pesca que llegaban, desde Marruecos, al puerto de Barbate.
Los agentes sometieron a vigilancia el muelle pesquero de Barbate y el pasado 13 de octubre detectaron la sospechosa llegada a puerto de una embarcación con base en Algeciras.
Una furgoneta se acercó entonces a la embarcación, cuyos tripulantes cargaron en ella numerosos aparejos de pesca, transportados en varias espuertas de goma negra, mientras uno de ellos permanecía en clara actitud de vigilancia.
Antes de que sacasen la furgoneta del muelle, los agentes interceptaron el vehículo, en cuyo interior fueron hallados numerosos paquetes de pequeño tamaño envueltos en cinta adhesiva, que tenían en su interior "bellotas" de polen de hachís de gran pureza.
Tras ello, los agentes detuvieron a los tripulantes de la embarcación como presuntos autores de un delito contra la salud pública.
Los detenidos fueron puestos a disposición del titular del Juzgado de Instrucción nº 2 de los de Barbate, quien decretó el ingreso en prisión para el patrón de la embarcación y la libertad con cargos para el resto de los detenidos.