Las quejas por asuntos relacionados con la prestación del servicio del gas se han incrementado considerablemente en los últimos meses.

Tanto es así que, como señalaban ayer desde la Oficina Municipal de Atención al Consumidor (OMIC) de Algeciras, en tan sólo tres meses se han registrado por este motivo 14 reclamaciones, frente a las 20 que se pusieron en todo el año 2011.

En base a la información aportada por este organismo municipal, la totalidad de las quejas formuladas por los usuarios tenían un denominador común: dar parte de un cobro abusivo por la revisión de la instalación.
Estos hechos dan lugar a una modalidad de timo muy extendida y que ya se ha producido en varias oleadas en Algeciras. 

Empresas supuestamente autorizadas para prestar este tipo de servicio acuden a domicilios elegidos al azar e informan a sus ocupantes de la obligatoriedad de hacer la revisión sin haber establecido una cita previa.

Desde la OMIC recordaron la peligrosidad de las artimañas de estas empresas, que en ocasiones llegan a provocar pequeñas fugas de gas en las instalaciones para provocar la posterior llamada del cliente y facturar la reparación.

Posteriormente, y tras acceder a la vivienda, analizan la instalación e informan al propietario de la necesidad de cambiarla, labor por la que cobran un precio desorbitado.

Hasta 400 euros
Según informaron desde la OMIC, en algunas ocasiones la factura extendida por los técnicos sobrepasa los 400 euros, aunque lo normal es que giren en torno a los 100-150 euros, y las más bajas suelen rondar los 60.

La OMIC resaltó que estas compañías se hacen pasar por las concesionarias habituales de este tipo de servicio, e incluso, en ocasiones, por miembros de la Administración, para ganarse la confianza de los usuarios.

La oficina del consumidor recordó que sólo serán “válidos a efectos de revisión los servicios prestados por empresas e instaladores autorizados por la Delegación Provincial de Industria” y que el consumidor puede exigir la presentación de documentación acreditativa a aquellas personas que se presenten en su domicilio en calidad de revisores o instaladores del gas. Una vez terminada la revisión, el instalador extenderá un certificado acreditativo por triplicado, y el original se lo deberá quedar el usuario, quien además debe hacérselo llegar a la empresa suministradora.

Desde la oficina municipal recordaron que las empresas suministradores tienen la obligación de “notificar a los propietarios y usuarios de la obligación que tienen éstos de revisar las instalaciones”, además de “disponer de un servicio de consulta, reclamaciones y averías”. 

Asimismo, resaltaron que tienen que llevar “un censo de usuarios, en el que consten los datos de la instalación y los resultados de las revisiones periódicas”. Por último, tienen que tener “actualizadas las pólizas de seguros que se determinen reglamentariamente”.

Obligaciones del usuario
Por su parte, el usuario del servicio tiene la obligación de propiciar la revisión de sus instalaciones “cada cuatro años, si es gas canalizado; y cada cinco, en el caso de que se trate de bombonas”.

Desde la oficina municipal incidieron en que este timo se realiza principalmente sobre personas de avanzada edad y rogó precaución a los ciudadanos.