La Delegación de Urbanismo del Ayuntamiento de Jerez de la Frontera (Cádiz) ha recepcionado las obras de apuntalamiento y consolidación de las fachadas de un inmueble de la calle Porvenir, esquina con Marimanta, que se encontraba en estado ruinoso y suponía un peligro para los viandantes debido a los continuos desprendimientos de elementos de las cornisas y los balcones.
Según indica el Consistorio en una nota, el delegado de Urbanismo y Movilidad, Agustín Muñoz, ha explicado que "debido al incumplimiento del propietario del inmueble de las medidas de seguridad, y el evidente peligro que supone para los vecinos el estado del edificio, se procedió a decretar la ejecución subsidiaria de las obras, que ahora se han terminado". De esta forma, ha añadido el delegado, "esta actuación ha permitido que un inmueble que fue declarado en ruina urbanística en el año 2010 deje de ser un peligro para los viandantes y los vehículos que circulan por la zona".
Ha explicado que mientras no se proceda a la rehabilitación del inmueble por parte del propietario, la actuación realizada ha consistido básicamente en apuntalar las fachadas de ambas calles que se han revestido con elementos para proteger a la vía pública de caídas de elementos sueltos. Las obras han tenido un importe total de 10.520,95, cantidad que se repercutirá al propietario del inmueble.
El Consistorio ha recordado que antes de esta actuación la zona estaba vallada, lo que impedía la circulación rodada por la calle Marimanta. Pero ha lamentado que el vallado "fue objeto de continuos robos, teniendo que ser repuesto en repetidas ocasiones por los trabajadores de Infraestructuras, por lo que no cumplía la función para la que fue instalado, que era la de proteger a los viandantes de la zona".
Los vecinos denunciaron esta situación por el riesgo que suponía el estado de las fachadas, agravada por la demolición de los forjados.