Las obras que permitirán reconvertir el antiguo convento de San Agustín en un centro de negocios van a implicar además una mejora sustancial del entorno de este histórico edificio. En concreto, el proyecto incluye la reurbanización de la calle Puerto, que estrenará zonas de arbolado, estacionamientos para autobuses turísticos y una fuente cibernética.
Se trata, según explicó ayer la alcaldesa, María José García-Pelayo, de mejorar la imagen de uno de los principales accesos a la ciudad, de modo que el visitante “no pase de largo”.
Ese es el efecto colateral de unas obras cuyo principal objetivo es, en cualquier caso, el de facilitar un centro de negocios a pymes y emprendedores en el mismo corazón de la ciudad. Los trabajos comienzan hoy de manera efectiva, con la previsión de que concluyan a principios de la primavera de 2015, toda vez que su plazo inicial de ejecución era de catorce meses. Las obras van a ser realizadas por la UTE Nacimiento, Infraestructura y Medioambiente, integrada por Vimac y Francisco Manzano, contando con un presupuesto de 4 millones de euros.
El proyecto se desarrolla en base al convenio firmado en su día por el Ayuntamiento de Jerez y el Consorcio de la Zona Franca Gaditana y cuentan con financiación de los fondos Feder de la Unión Europea (UE). El primer reto es restaurar un consolidar los restos del antiguo claustro del convento de San Agustín, recuperándose posteriormente todo el edificio y adaptándose a las necesidades que requiere un equipamiento “moderno y funcional” que finalmente se pondrá en manos de emprendedores y pequeños autónomos.
Se prevé un incremento de la superficie construida mediante el aumento del volumen edificado, para lo cual se construirán entreplantas en el edificio principal y se pasará de dos a tres plantas el edificio anexo. Por último, el claustro principal se cubrirá mediante una bóveda acristalada de última generación.
El proyecto permitirá que el centro histórico cuente con un moderno equipamiento de 4.500 metros cuadrados, con 49 despachos de entre 14 y 66 metros cuadrados de superficie y sala de reuniones y usos múltiples que compartirán espacios con los destinados al apoyo de las empresas que se instalen en este centro.
“Servirá de apoyo a los emprendedores”
La alcaldesa, María José García-Pelayo, se mostró convencida de que este centro de negocios supondrá “un enorme estímulo para la economía local”, contribuyendo “a revitalizar el centro y la vida comercial”. Dado el “enorme beneficio” que este proyecto conllevará para la ciudad, la regidora agradeció al delegado especial del Estado del Consorcio de la Zona Franca, Jorge Ramos, la celeridad con la que se ha llevado a cabo el proceso administrativo previo al inicio de las obras, que arrancó en septiembre de 2012. El comienzo de los trabajos se produce además en un momento en el que los distintos indicadores “parecen apuntar a que 2014 será un mejor año para el desarrollo de la economía y para el empleo”.
Por su parte, Jorge Ramos subrayó labor del equipo técnico, tanto del Ayuntamiento como de la Zona Franca, que han hecho posible el proyecto, recordando los pasos que se han debido dar para avanzar en el procedimiento administrativo hasta llegar al día de ayer. El delegado de Zona Franca incidió en la importancia que a su juicio tiene esta actuación, ya que “pone en valor y demuestra la apuesta” que hace el Consorcio “por el mundo de los emprendedores”, partiendo de la base de que esta entidad “tiene vocación de convertirse en su casa” y de “dinamizar el tejido económico de la provincia”.
Para Jorge Ramos, esta actuación en el antiguo convento de San Agustín refleja además el “compromiso” de la Zona Franca de “ir pagando la deuda que tiene con Jerez debido a un convenio que no se desarrolló en su día y que ahora, con esta y otras actuaciones en marcha, se quiere saldar”. Zona Franca tiene previsto dotar a Jerez de un recinto fiscal de 1,3 millones de metros cuadrados de superficie; además de actuar en el polígono industrial El Portal para su transformación.
