La Virgen del Perpetuo Socorro lució en su fajín la medalla de su hermana mayor, que lucha contra una dura enfermedad
El segundo hito de este Domingo de Ramos, junto con el de Pasión, se produciría a las cuatro y media de la tarde en la ermita de Guía. Los cofrades de la Hermandad del Perdón han vivido posiblemente la Cuaresma más complicada de su historia reciente, porque fue precisamente en las vísperas cuando supieron que su joven hermana mayor, Eva Castañeda, debía enfrentarse a una dura enfermedad.
Eva fue dada de alta hospitalaria este pasado viernes y evoluciona favorablemente, pero ayer no pudo acompañar a sus titulares. Su vara dorada se quedó en la ermita de Guía, pero la Virgen del Perpetuo Socorro lució su medalla en el fajín, acompañada del lazo rosa que simboliza la lucha contra el cáncer.