La celebración en el Circuito de Jerez de dos grandes premios valederos para el Campeonato del Mundo de Motociclismo no ha cubierto las expectativas que había depositado en ellos el sector turístico, que apenas ha obtenido beneficio alguno de unas pruebas que se han celebrado a puerta cerrada.
Todo el mundo era consciente de que a la ciudad no iban a llegar este año miles de moteros, pero se esperaba al menos que algunos aficionados aprovecharan la coincidencia de los grandes premios con el periodo vacacional para acercarse a Jerez, lo que sin duda hubiera traído beneficios al sector hostelero.
“Teníamos confianza en que se viera algún ambiente en la calle y en que los bares se hubieran beneficiado de ello, pero la realidad es que no ha venido nadie. Igual si pensamos en la pandemia y en los rebrotes eso nos venga bien, pero económicamente no era lo esperado”, admite Antonio Mariscal, presidente del Clúster Turístico.
A la ausencia de aficionados en la calle se ha sumado el hecho de que el personal técnico de las escuderías hospedado en Jerez no ha podido moverse de los hoteles debido a las restricciones sanitarias.
“Ha venido todo el mundo con pensión completa y con las salidas a la calle muy restringida debido a los protocolos de seguridad. Se han limitado a ir del hotel al circuito y por eso no se han producido beneficios en otros establecimientos hosteleros”, añade.
El presidente de Horeca, Antonio de María, también admite que el resultado de los grandes premios ha quedado “por debajo de las expectativas”.
“La ocupación de este fin de semana ha sido del 75 y el 77 por ciento, y eso teniendo en cuenta que los hoteles grandes en los que se alojaban los equipos estaban completos, lo que significa que el resto de los establecimientos apenas han pasado del 30 por ciento”, aclara.
De María entiende que las noticias de rebrotes del Covid-19 en numerosos puntos del país afecta psicológicamente a las personas que tienen intención de desplazarse, como prueba el hecho de que día tras día se produzcan cancelaciones de reservas realizadas con anterioridad.
Algo en positivo
Más allá de que económicamente no se han cubierto las expectativas, la celebración de estos grandes premios tiene consecuencias positivas para la ciudad.
“El impacto mediático está ahí y hay que tenerlo siempre muy en cuenta. Además de eso, entiendo que gracias Dorna deberá tener en cuenta en un futuro próximo la apuesta que Jerez ha hecho por el Mundial, así que igual esto nos beneficia si se tiene en cuenta ese calendario de rotaciones del que se venía hablando”, subraya Antonio Mariscal.
Ahora resta la celebración del Mundial de Superbike, que no va a traer aficionados, pero que al menos permitirá cubrir plazas hoteleras.
Ya se teme lo peor para este otoño
El sector turístico no va a alcanzar tampoco los objetivos propuestos para los meses de julio y agosto, que se creía iban a ser bastante más favorables.
Antonio Mariscal entiende que hay “crisis de confianza” e incluso “miedo” en el cliente potencial, lo que se traduce en cancelaciones de reservas.
Con todo, el problema de verdad llegará en septiembre. “En otoño dependemos un poco más del turista internacional y mucho nos tememos que ese no va a venir. Además, también se depende de los eventos y de los puentes y todo eso está ahora en entredicho. Las empresas pequeñas, que son la mayoría, no tienen recursos para aguantar esto”, advierte.