El Ayuntamiento de Trebujena ha demandado al Consejo Regulador de los vinos del Marco de Jerez que reconozca por fin al municipio, al margen de como zona productora, como zona de crianza de los vinos de la Denominación de Origen Jerez-Xérèz-Sherry, Manzanilla de Sanlúcar y Vinagre de Jerez, una reivindicación histórica que ahora cobra más relieve por haberse empezado al menos a discutir en el pleno del organismo regulador.
En plena recta final de la vendimia, el alcalde de la localidad Jorge Rodríguez y el primer teniente de alcalde Ramón Galán han mantenido un encuentro con los presidentes de las dos cooperativas vitivinícolas del municipio, José Manuel Sánchez, de Virgen de Palomares, y Pepe Castillo, de la cooperativa Albarizas, para interesarse por la situación de un sector clave para la economía trebujenera y con mucho potencial tanto en la pelea porque los trebujeneros puedan hacer sus propios vinos bajo la referida DO, la más antigua de España, como en el desarrollo de más actividad enoturística en la zona.
“Para Trebujena es un momento del año muy especial porque no es solo algo económico, sino que es también una cuestión cultural. Rara es la familia que no se dedica al mundo de la viticultura como complemento, pero casi todas tienen su trocito de viña y viven estos días de forma muy especial”, ha recordado Rodríguez. A nivel económico, las dos cooperativas “suponen entre 2 y 3 millones de euros de facturación para el pueblo y eso se percibe en estos 15-20 días de campaña de vendimia, que es fruto de trabajo de un año completo de la gente de Trebujena, pues entre las dos cooperativas son casi 700 socios y eso significa muchísimo en un pueblo con unas 3.000 personas en población activa”.
En todo esto, es de vital importancia, como ha destacado el alcalde de la localidad, el hecho de que “Trebujena históricamente no ha tenido reconocido el derecho como zona de crianza, y eso es inexplicable. Es una deuda histórica que tiene con nuestro pueblo, y con otras zonas,el Consejo Regulador de los Vinos de Jerez, y desde el Ayuntamiento de Trebujena demandamos una solución inmediata para que se reconozca a nuestra zona como zona de crianza”.
Entiende Rodríguez que esta consideración “no es la panacea ni la solución a los males de la agricultura en general, que son los precios al sector primario, por lo que hay que intentar buscar otras vías, y una de ellas puede ser la de producir nuestros vinos propios de Trebujena bajo la Denominación de Origen Jerez-Xerez-Sherry”. “Esperemos que en los próximos meses se pueda producir este reconocimiento”, ha expresado convencido, antes de destacar la importancia de la tradición ecológico de la producción y crianza en Trebujena, y el peso histórico del vino con su vertiente turística. “Aquí todo se hace a mano, el tipo de viñedo es el tradicional, cultivado a mano, de forma ecológica, y eso en el sector de la comercialización se puede potenciar mucho, y también a través del enoturismo, con visitas a los mostos y a los viñedos que hacen sus propios vinos de autor”.
En Trebujena, una tierra donde la viticultura lleva implantada desde hace siglos, “hay capacidad y gente que lleva 30 ó 40 años haciendo sus propios vinos que merecen contar con este reconocimiento, al igual que esto ocurre en Ribera del Duero o la Rioja. La actividad turística y cultural en torno al mundo del vino merecen ese reconocimiento, y es una potencialidad para el sector turístico y ecológico de Trebujena para poder seguir desarrollándose, tiene conocimientos propios y personal cualificado para ello”, ha finalizado Jorge Rodríguez.