Sufrida y merecida victoria la lograda por el Málaga CF en la decimosegunda jornada de Segunda División. Tras cuatro empates consecutivos, el equipo demostró que también sabe conjugar el verbo ganar.
Comenzó el equipo blanquiazul con una marcha más. Dioni gozó de una ocasión clarísima cuando todavía no se había cumplido el minuto uno. Gabilondo centró al primer palo, donde se apareció el delantero malagueño, que no pudo darle a su remate la dirección deseada.
David Larrubia se encontraba cómodo probando a su par con balones al espacio. El mayor ímpetu de los locales hizo que una Rosaleda, abarrotada como siempre, animara a su equipo desde los primeros compases.
La primera de los armeros llegó en el 8'. Corpas apareció dentro del área para sacarse un tiro raso que desvió a saque de esquina con una meritoria parada, para sorpresa de nadie, Alfonso Herrero. El encuentro tenía ritmo, algo que ne muchos momentos de la temporada se ha echado en falta.
El empeño malaguista tuvo su recompensa llegado el 15'. Kevin se inventó una buena jugada por la izquierda, con centro-chut posterior que tuvo que desviar Fuzato. Al rechace llegó un David Larrubia atentísimo que, con un suave toque, puso el 1-0 en el electrónico.
A partir de aquí, los vascos tuvieron mayor posesión del balón y adelantaron líneas. Un arma de doble filo, puesto que el Málaga aprovechaba las pérdidas para montar interesantes contraataques con sus jugadores más veloces.
A punto estuvo Larrubia de lograr su doblete particular alcanzada la media hora, precisamente a través de una de estas contras. El extremo recibió en el centro del campo con muchos metros por delante. Se plantó en la frontal, aunque su tiro se marchó rozando la escuadra.
El equipo de Pellicer seguía dominando ambas áreas. La rival, con las diabluras de Kevin que a punto estuvieron de suponer el segundo. En la propia, con una nueva parada de Alfonso Herrero, en este caso ante un tiro de Alkain. Poco más ocurrió antes de llegar al descanso.
La acción polémica del choque llegó en el minuto 55. Reclamó todo el malaguismo una mano dentro del área de Peru Nolaskoain. De hecho, el VAR llamó al colegiado para ir a revisar la jugada ante un posible penalti. No obstante, este terminó señalando mano previa de Dani Lorenzo y falta favorable al Eibar.
Corpas probaba fortuna con un disparo a botepronto desde fuera del área que estuvo cerca de convertirse en el gol de la jornada. Los de Etxeberria mostraban ganas e ímpetu, pero el Málaga no sufría en exceso, seguía generando peligro a la espalda de su rival.
Kevin probó fortuna con un chut raso desde lejos que desvió como pudo Fuzato. Dani Lorenzo pudo poner el 2-0 tras el rebote, pero de nuevo el meta eibarrés se mostró muy atento. Pellicer aportó piernas frescas con cuatro cambios prácticamente consecutivos, uno de ellos obligado tras la lesión de Luismi.
Se salvó el Málaga con dos paradas sobre la línea. Primero, de Alfonso Herrero, tras el centro de un córner que se colaba directamente en la portería. Inmediatamente después, Manu Molina con un despeje de cabeza. Larrubia probó fortuna en el contraataque, mediante un tiro con la diestra que pegó en el lateral de la red.
Aplicó dormidina el Málaga en los minutos finales para que pasase entre poco y nada y así sumar un nuevo triunfo que sitúa al equipo con unos muy meritorios 17 puntos.
