La Empresa Municipal de Aguas (Emasa) ha publicación el borrador de las ordenanzas relativas a los servicios de abastecimiento, saneamiento y depuración de agua en el Portal de Participación Ciudadana. Así, tras justificar la subida que se viene de manera, parece que, irremediable, en que "tras ocho años de congelación en los que los costes energéticos y de producción se han incrementado en un 26,4%, así como los nuevos servicios que se prestarán y el plan de infraestructuras que se pretende acometer", describe por donde va el bocado al bolsillo del usuario.
Así, se plantea un aumento de tarifas que “además de acompasarse a la subida acumulada del IPC (el citado 26,4% en la provincia desde febrero de 2016 hasta septiembre de 2023)” con la excusa de “alcanzar el equilibrio financiero”, aseguran que permitirá acometer de forma progresiva el plan de inversiones valorado en 100,3 millones proyectado para la ejecución de obras que el gobierno municipal del PP considera “necesarias para renovar infraestructuras y hacer frente a situaciones de sequía, así como a la prestación de nuevos servicios que serán asumidos por Emasa con un coste anual de 7,29 millones”, aunque se optado por no implantar un canon específico para financiar las inversiones, de forma que quedará integrado en las tarifas, que puede destinarse finalmente a ello o no.
En cualquier caso, si vamos a los números, que es lo que interesa a los malagueños, la empresa municipal calcula que el primer año el incremento en un hogar medio será del 32,8% pasando de 14,59 a 19,38 euros al mes (sin IVA), lo que supone 4,79 euros más al mes o 15 céntimos más al día.
En el segundo año (2025) se subiría en unos 0,36 euros más al mes; otros 0,36 en 2026; 0,48 adicionales en 2027 y otros 0,48 en 2028. Cuando se complete la subida progresiva en su quinto año cada vivienda acabará pagando, de media, en torno a 6,47 euros más al mes respecto a lo que paga actualmente.
Emasa señala que cada hogar de la capital pasará de abonar 14,59 euros a 19,38 euros al mes de media en 2024 y 21,05 euros en 2028, para un promedio al final del quinto año del 44,3%.
Oposición de PSOE y Con Málaga
Para los grupos municipales de PSOE y Con Málaga esta subida del agua se trata de un "auténtico engaño" y una "tomadura de pelo".
La viceportavoz municipal socialista, Begoña Medina, ha advertido de que "la cuota fija o de servicio pasaría en el primer tramo, hasta 15 milímetros, desde los 2,547 euros al mes a los 3,23 euros al mes" y "la cuota variable por consumo pasaría de los 1,91 euros que se cobra por metro cúbico en el primer tramo, hasta los dos metros cúbicos, a un incremento en el recibo de 0,43 euros por metro cúbico". Una subida en el recibo de Emasa de más del doble en los consumos más bajos, como es el caso de las personas mayores que viven solas".
Además, Medina ha explicado que han pedido "al alcalde que ese supuesto 17,4% de superávit para 2024 por dinero que no se ha gastado en servicios públicos se destine a la mejora de las infraestructuras hidráulicas necesarias en Málaga y, de esta forma, no aplicar la subida de más de 38 por ciento en el recibo de Emasa".
Por su parte, Con Málaga ha asegurado que "es un auténtico engaño con el que el equipo de gobierno (del Partido Popular) pretende maquillar una subida que pueda acabar siendo superior a la anunciada inicialmente del 42%". "El Ayuntamiento se ha visto obligado por la movilización ciudadana a plantear una subida progresiva pero solo el primer año los hogares malagueños tendrán que pagar una media de 120 euros anuales más", ha asegurado en un comunicado el viceportavoz del grupo municipal, Nicolás Sguiglia.
Por su parte, Toni Morillas, portavoz de Con Málaga, ha agregado que el "Ayuntamiento no puede cargar ahora sobre los bolsillos de los malagueños y las malagueños los costes de mejora del servicio que debería haber acometido con los beneficios de años anteriores".
También desde la confluencia han acusado al equipo de gobierno "de haber utilizado estos beneficios para otras inversiones municipales ajenas a Emasa".
