La fe y la devoción, el salud y el bienestar, el placer o el clima son algunos de los múltiples temas que trataban los códices históricos que han sido 'clonados' por el editor Manuel Moleiro con las mismas técnicas y materiales, con lo que ha conseguido incluso que huelan como los originales.
Una veintena de réplicas exactas de obras fechadas entre los siglos VIII y XVI se exponen desde este jueves en una exposición temporal en la Sociedad Económica de Amigos del País de Málaga.
"Eran códices para reyes, emperadores y gente que se podía pagar este tipo de cosas, que contenían todo lo que pudiera dar conocimiento y saber, de dónde veníamos y adónde íbamos. Coleccionarlos era un símbolo de estatus entre quien los poseía y quien no", explica Moleiro en un recorrido por la exposición.
Los ejemplares originales "estaban al alcance de pocas manos, pero más que ahora, cuando están protegidos en bibliotecas nacionales o grandes museos como el Metropolitan o la Morgan, y la accesibilidad es nula, salvo en exposiciones, cuando se puede ver el libro abierto por una sola página con poca luz", lamenta el editor.
"Estas obras surgieron como tesoros, porque originalmente ya costaban una fortuna, al contratar a los mejores pintores y científicos, que dedicaban años a hacerlas".
Temática muy diversa
Los temas eran muy amplios, relacionados "con la necesidad de conocer y controlar los cielos del tiempo y el clima, cuándo tenían que hacer plantaciones de alimentos, el arte, el bienestar, comer bien, tener salud y por supuesto la devoción, porque vivían obsesionados con el paso de este mundo al otro", señala Moleiro.
A todo ello se suma "el gran espíritu explorador que permitió que se fueran descubriendo distintos países y que desde finales del siglo XV se produjeran los grandes descubrimientos", un afán del que dan fe los distintos ejemplares de atlas que se exponen en Málaga.
Entre las curiosidades figura además un ejemplar de 'Lazzat Al-Nisa' ('El placer de las mujeres'), que describe los cuatro 'tipos' de mujer e indica los días y horas en que cada uno es más propenso al amor, y cuyo original se conserva en la Biblioteca Nacional de Francia en París.
"Es un libro de la zona de la India, donde siempre ha habido un enorme interés por la sexualidad y que es muy útil y práctico, con buenos consejos para el hombre y la mujer. Da ideas para elegir, para juntarse con quien uno debe y para que las cosas funcionen bien, y se basa en rasgos físicos como los tobillos o aspectos del rostro", precisa el editor.
Más de 30 años de réplicas
Moleiro trabaja con su editorial desde 1991 en la creación de estas réplicas, y en este periodo ya ha superado el medio centenar de obras. "Parecen pocas, pero esto lleva años. La Biblia de San Luis original tardaron doce años en hacerla, y yo he tardado seis, o sea, que les he ganado por goleada", bromea.
Esa Biblia, que tiene casi 5.000 ilustraciones hechas artesanalmente a mano, es la réplica más valiosa de la exposición, con un precio en torno a los 22.000 euros.
"Siempre usamos los mismos materiales, pergamino o papel, y encuadernamos tal cual está el original, en piel o terciopelo. Si lo ha mordido una polilla, reproducimos la mordedura con láser, y hasta tienen el mismo olor", destaca Moleiro.
Complicidad con los propietarios
Ha viajado por medio mundo para crear estas réplicas "con el original delante" gracias a una "colaboración de complicidad" con las instituciones propietarias.
"A la institución le hago un gran favor, porque para las exposiciones ya no usan los originales, sino nuestros clones. El Estado francés hizo una gran exposición por los 800 años del nacimiento de San Luis y la única pieza no original era la Biblia, de la que nos pidieron prestado un ejemplar que fue la base de la muestra".
El editor desvela que la explicación de que huelan como los originales es simple. "Lo del olor es porque usamos los mismos materiales, y piel curtida como entonces, en un periodo de 9 a 18 meses, mientras que ahora se usan productos químicos para agilizar los tiempos. Dentro de quinientos años, seguirá estando igual".