Tomarse un café y comerse la cucharilla es posible gracias a la creación de dos jóvenes universitarios malagueños que han ideado unos cubiertos comestibles que, además de ser veganos, sin gluten y sin azúcar añadido, ayudan a combatir el cambio climático.
Según explican a EFE Iván Marmolejo y José Rojas, con esta creación, que ya se puede degustar en seis restaurantes de Málaga, pretenden reducir "al máximo" los residuos que se generan al remover las bebidas y aportar al comensal una experiencia "diferente" y sorprendente.
"Lo que hacemos son removedores comestibles para el café, es decir, estos típicos palitos que son de madera para remover la bebida, que los usas y luego los tiras. Pero estos se pueden comer, por lo que producen cero residuos, a la vez que generan una experiencia llamativa para el cliente", señala Marmolejo, de 20 años.
Así, estos cubiertos que están hechos con harina de arroz, resisten la temperatura del café sin derretirse y tienen un ligero sabor a vainilla, pasan de ser un utensilio "únicamente funcional" a ser también un alimento "saludable" y "nutritivo".
Una "muy buena" acogida
Según este emprendedor, la acogida está siendo "muy buena", ya que a la gente le llama la atención por tratarse de algo "muy novedoso". Quienes lo han probado valoran, sobre todo, que contribuyen a reducir la generación de residuos.
"Muchas personas lo aprecian porque dicen que siempre ven los típicos palitos tirados en el suelo y esto al final es una alternativa que reduce esos residuos y que gusta bastante, porque suelen decir que está rico", ha resaltado.
En este sentido, una de las camareras del restaurante del OXO Museo del Videojuego de Málaga asegura a EFE que los clientes les transmiten que es un producto que les parece muy interesante y con muy buen sabor.
"Si alguien no se come estos removedores es porque no sabe que son comestibles, cuenta la trabajadora".
De Costa Rica a Málaga
José Rojas, de 19 años, explica que la idea de hacer este producto nació en Costa Rica, durante un viaje que hicieron con los compañeros de universidad.
"Estábamos en el país del café y después de visitar muchos cafetales y hablar con un montón de expertos nos apasionamos por este mundo. Pensamos que queríamos sacar algún producto en torno al café y pensamos en los cubiertos comestibles, ya que vimos que allí, en Latinoamérica, están creciendo mucho", ha detallado.
Al regresar contactaron con un fabricante ubicado en Barcelona y, después de obtener las primeras muestras, recorrieron "toda Málaga", cafetería a cafetería, para mostrarles el producto, obtener sus impresiones y ofrecérselo.
A principios de 2024 cofundaron la empresa Plash, que presentan como la primera compañía en España focalizada en la distribución de removedores comestibles en el sector hostelero.
Según aseguran estos dos jóvenes emprendedores, lo más complicado para poner en marcha el proyecto ha sido empezar de cero en un mercado tan nuevo y sin inversión, pero una vez que han logrado iniciar el negocio su objetivo es continuar expandiéndose por Andalucía y después llevar estos removedores comestibles a restaurantes y cafeterías del resto de España.