En el día de anteayer jueves la Ertzaintza y la Policía ya interrogaron al detenido sobre su relación con el móvil y negó en todo momento su relación con el atentado. De hecho, alega que le robaron la documentación y fue con ella con la que se adquirió el teléfono. Una versión que no descartan los investigadores, pese a que el arrestado no denunció la sustracción de su documentación hasta varios días después de que se hciera efectiva la compra del móvil.
En estos momentos todas las posibilidades están abiertas, tanto la version del detenido sobre el robo de la documentación, como la de que el arrestado tuviera algún tipo de relación con los autores del atentado. El detenido, que responde a las iniciales de J.M.M.G. y rechazó colaborar con la policía, fue trasladado desde las dependencias de Bilbao a Madrid, hasta la Comisaría General de Información donde permanece en régimen de incomunicación.
Interrogado sobre los detalles del atentado, Balza confirmó lo que ya adelantó el ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, que el coche bomba fue robado la noche del miércoles en la localidad guipuzcoana de Zumaia, lo que demuestra que los terroristas montaron la bomba con mucha celeridad aunque todavía no se sabe dónde lo hicieron.
“Ahora hay que dejar que la investigación avance a ver si el montaje de la bomba en el coche se realizó en Guipúzcoa o en Navarra”, apuntó.
La Universidad española protesta con cinco minutos de silencio
El mundo universitario salió ayer a la calle para protestar con su silencio por el último atentado perpetrado por ETA en la Univiersidad de Navarra. En el centro pamplonés, cientos de personas se concentraron para guardar cinco minutos de silencio en señal de repulsa por el atentado perpetrado el jueves en el aparcamiento del campus al cabo de los cuales el rector del centro, Ángel Gómez, aseguró que la vuelta a la “normalidad” es la mejor respuesta a la barbarie etarra. Un gesto que se repitió en la mayoría de campus de toda España en respuesta a la convocatoria de la Conferencia de Rectores (CRUE) que llamó a todos los centros universitarios para concentrarse en “defensa de la Justicia y la convivencia”.
Desafiando al frío y la lluvia, cientos de personas entre profesores, alumnos, trabajadores del centro y personalidades del mundo político y académico guardaron cinco minutos de silencio em ña explanada del edificio de Ciencias Sociales de la Universidad de Navarra. La concentración, que terminó con un aplauso, estuvo presidida por el presidente de Navarra, Miguel Sanz. Allí también estuvieron la delegada del Gobierno en la comunidad foral, Elma Sáiz, la presidenta del Parlamento navarro, Elena Torres, la alcaldesa de Pamplona, Yolanda Barcina, y representantes de todas las fuerzas políticas navarras, excepto, logicamente, de ANV.
Sanz transmitió “en nombre de todo el pueblo navarro” la condena “más enérgica” al atentado y destaco que el centro “ha sabido superarlo con valentía” al reiniciar las clases al día siguiente. En este sentido señaló que la útlima acción de la banda terrorista “no ha sido contra la Universidad”, sino que ha sido contra Navarra contra uno de sus referentes “más importantes” y en uno de sus símbolos “más extraordinarios” que ha tenido la Comunidad foral para “su desarrollo económico y social”. “Todos los navarros de bien tenemos que decir que vamos a seguir apoyando a la Universidad y combatiendo a esta lacra de criminales”, sentenció.
Por su parte, el rector de la Universidad de Navarra, Ángel Gómez Montoro, reafirmó su deseo de “seguir adelante con las actividades ordinarias” y transmitió su “cariño” y “afecto” a los dos estudiantes que continúan ingresados. Tras agradecer a toda la comunidad universitaria su “actitud de repulsa serena”, para que “todo pudiera volver hoy (por ayer) a la normalidad”, aseguró que “lo mejor que podemos hacer frente al terrorismo es la normalidad”. “No van a pararnos, vamos a seguir trabajando sin temor y sin rencor, pero sacando adelante todos los proyectos que tenemos entre manos, para lo que contamos con todos los estudiantes, profesores y el apoyo y cariño de todas las instituciones”, proclamó.
LA UNIVERSIDAD “ES UNA”
Concentraciones de estudiantes y profesores que se repitieron en toda España en respuesta a la convocatoria realizada por la Conferencia de Rectores (CRUE). Su presidente, Ángel Gabilondo, encabezó la concentración celebrada en la Universidad Politécnica de Valencia (UPV) donde destacó que “hoy (por ayer) todas las universidades somos una” y aseguró que actos como el de ayer “atentan contra los principios que constituyen la sociedad y también contra los valores universitarios en los que creemos”, aseguró el presidente de la CRUE.