Durante una vista preparatoria para su juicio, Karadzic se mostró convencido de que el recuento de las víctimas de esa masacre ocurrida en 1995 es “erróneo”.
Con esta postura dejó entrever la que posiblemente será una de las líneas básicas de su defensa: poner en duda que en Srebrenica fallecieran cerca de 8.000 musulmanes varones en una ofensiva serbobosnia.
Karadzic quiere que la fiscalía le facilite muestras de ADN usadas por sus expertos para que su equipo defensor pueda hacer su propio recuento de víctimas.
Durante la vista declaró: “Estamos convencidos de que hay una exageración” en ese recuento, y añadió: “Queremos demostrar la verdad”.
La teoría de Karadzic, según explicó ayer en la sala del tribunal, es que muchas de las víctimas que se han contabilizado como muertos de Srebrenica pudieron haber muerto “en combate o en el bosque”, según sus propias palabras.