Con un desfibrilador por cada 92 habitantes, el municipio malagueño de Jimera de Libar, en la comarca de la Serranía de Ronda, se ha convertido en la localidad más cardioprotegida de España, donde la media es un aparato de este tipo por cada 2.000 personas.
El municipio cuenta un total de cinco desfibriladores de uso público, distribuidos por la localidad, y muchos de sus ciudadanos ha recibido formación en el uso de estos equipos y en técnicas de reanimación cardiopulmonar (RCP) y soporte vital avanzado (SVA) para que puedan actuar correctamente y con eficacia ante cualquier emergencia cardíaca.
El alcalde de la localidad, Francisco Lobos, tomó la decisión de cardioproteger el pueblo, y por tanto a sus vecinos y visitantes, tras conocer que en la céntrica calle Larios de Málaga capital se habían instalado desfibriladores.
Así, el proyecto comenzó con la instalación de un primer desfiblilador, que contó con el apoyo de la Diputación malagueña y recientemente se han instalado otros cuatro equipos. "Los vecinos están encantados porque se sienten más seguros y otro tanto ocurre con los miles de visitantes que recibimos cada año", ha apuntado el alcalde.
Dos de los desfibriladores están ubicados en las dos plazas del pueblo más concurridas: la Plaza Virgen de la Salud y la Plaza de San Roque. Esta última instalación cuenta con desfibriladores DOC de B+SAFE, los más avanzados del mercado, que proporcionan al usuario teleasistencia 24 horas por parte de un especialista en emergencias, llamada al 061 y geolocalización con la ubicación del desfibrilador.
También cuentan con sistema de telecontrol permanente y telemantenimiento que garantizan su buen funcionamiento.
"Queremos concienciar y enseñar a la población a saber actuar ante una emergencia cardíaca. Que sepan dónde hay un desfibrilador disponible en Jimera de Libar y cómo usarlo", ha agregado su alcalde.
La ciudad de Málaga es, según han indicado desde B+Safe en un comunicado, otro ejemplo en el avance de la cardioprotección en España. Actualmente cuenta con un desfibrilador por cada 1.900 habitantes, con la reciente ampliación de 50 nuevos.
La cardioprotección es una tendencia emergente orientada a la protección del corazón en caso de episodios cardíacos. El gran número de muertes por este motivo ha animado a gobiernos, empresas, entidades y asociaciones a concienciar a la población y tomar medidas que permitan revertir la situación gracias a la creación de zonas o espacios cardioprotegidos.
Desde B+Safe han considerado "importante" que en las comunidades autónomas informen a las autoridades competentes de un registro para conseguir llevar un mapa o listado de los puntos de cardioprotección en cada una de esas zonas.