El centrocampista sanluqueño Adri Pérez-Gil se encuentra en Italia desde hace varias semanas, adaptándose a un nuevo país y a su actual club, el Sambuceto, de la Liga Escellenza. El futbolista de la Ciudad de la Manzanilla ha decidido vivir una nueva experiencia tras haber afrontado dos temporadas muy positivas en el Antoniano, equipo de Lebrija con el que ascendió a la Tercera División, disputó la Copa del Rey ante el Betis y con el rozó afrontar la fase de ascenso a la Segunda División B.
El Sambuceto es un club humilde con ganas de hacer las cosas bienSobre qué valoración hace de su estancia en el país transalpino asegura que “me encuentro muy feliz por estar en Italia. Sinceramente creo que es una de las mejores decisiones que he tomado en el mundo del fútbol”.
Resalta que “me he adaptado bien y también me ha venido fenomenal que me esté ayudando mucho mi compañero Manu Alcazar, que es español y que domina el idioma italiano. Eso es fundamental para mi adaptación”. Sobre si ha detectado costumbres distintas entre España e Italia dice que “en el fútbol hay cosas que cambian, no es como en nuestro país en muchos sentidos”.
Sobre la impresión que le ha dejado el Sambuceto destaca que “estoy contento tanto por el trato de los jugadores, el cuerpo técnico, la directiva, el presidente, el utillero... Todo esto hace que esté como en casa. En todo momento están pendientes de mí, también como los que son de otros sitios. El Sambuceto es un club humilde con ganas de hacer las cosas bien”.
De lo que será la próxima temporada hace constar que “ya se lo he comunicado a mi familia, estoy contando los días para que llegue el 13 de septiembre para disputar el primer partido de Copa y el 20 de este mes para que comience la Liga. La pretemporada es muy importante pero ya estoy deseando de que comience la competición”.
De cómo se encuentra la pandemia en Italia reconoce que “sinceramente estoy un poco perdido pero aquí no se escucha tanto como en España. La mascarilla es para estar caminando pero no es obligatorio en la calle, sólo para entrar en tiendas y comercios”.
No puede obviar que residiendo en Italia echará de menos Sanlúcar: “Tener lejos a la familia, a la novia y a los amigos no es fácil pero gracias a ellos hace que todo sea más llevadero. Lo llevo bien porque no es la primera vez que salgo de casa pero sí en el que voy a otro país. Contento porque también contaré las horas para volver a ver más adelante a la familia, la novia y los amigos”.
Se imagina que regresará en Navidad: “Sí, lo que no sé qué días serían pero la pasaré en casa. Tengo entendido que nos darán unos 10 días”. Sobre si es una apuesta personal haber recalado en Italia reconoce que “sí lo ha sido. El proyecto es muy ilusionante. La decisión fue fácil. Tenía otras buenas opciones en España pero cuando hablé con mi representante lo tuve claro, era irme a Italia. En Navidad salió esa oportunidad pero no pude venir por una serie de circunstancias”.
De sus nuevos compañeros agrade que “te ayudan en todo lo posible y si encima te toca un buen grupo pues mejor, es más fácil. Todo es mejor así. Los cuatro que estamos en el piso nos ayudamos en lo que podemos para que todo sea más fácil”.
Destaca que “me ha sorprendido el nivel que tienen mis compañeros. Estoy muy ilusionado porque creo que este año podemos hacer grandes cosas con el grupo que tenemos”.
Adri Pérez-Gil tiene 22 años y partió hasta Italia el pasado 6 de agosto. A pesar de su juventud ha pertenecido al Atlético Sanluqueño, Córdoba, Recreativo de Huelva, Conil, Cádiz y Antoniano. Confía en completar una gran temporada en el Sambuceto y en el plano personal seguir creciendo como futbolista. El de la Ciudad de la Manzanilla está muy ilusionado ante este nuevo reto.
