Uno de los pasajeros desembarcó previamente en la isla de Kárpatos "para recibir primeros auxilios debido a una enfermedad"
Los cerca de cuatrocientos migrantes que han estado navegando durante varios días por el Mediterráneo oriental a bordo de un barco con bandera turca y fueron interceptados el viernes por la guardia costera helena, están ya en el campo de refugiados de la isla griega de Kos, informó el ministerio de Migración.
Según el ministerio, las 375 personas de distintas nacionalidades ya se han instalado en el citado campamento y sus solicitudes de asilo están en curso.
Uno de los pasajeros desembarcó previamente en la isla de Kárpatos "para recibir primeros auxilios debido a una enfermedad" y otros seis han sido detenidos para ser interrogados, añadió la citada fuente.
"Grecia ha demostrado una vez más que protege vidas humanas en el mar y brinda protección, en un momento en que otros son indiferentes a sus obligaciones. Enhorabuena al personal del centro de registro de Kos que trabajó incansablemente durante la noche ”, señaló el ministro de Migración, Notis Mitarakis, en un comunicado.
El barco interceptado el viernes al este de Creta fue remolcado hacia la isla helena de Kos después de que Turquía denegara aceptar su devolución.
"Turquía se ha negado una vez más a cumplir sus compromisos con la UE. No ha aceptado la devolución de un barco de bandera turca que zarpó de un puerto turco, aparentemente con el conocimiento de la Guardia Costera turca y sigue siendo indiferente a las vidas humanas", señaló el sábado el ministro de Transporte Marítimo, Yannis Plakiotakis.
El ministro había solicitado previamente a Ankara que aceptara la devolución del barco, y había informado de ello a la Comisión Europea.
Plakiotakis recalcó que "Grecia demuestra una vez más que respeta plenamente el derecho internacional y que la protección de las fronteras marítimas se combina con la protección de la vida humana".
Las declaraciones del ministro contrastan con las críticas de la ONG Aegean Boat Report, que monitorea los movimientos de embarcaciones con refugiados en el mar Egeo.
Según la ONG, el Gobierno griego ha estado moviendo durante 24 horas de un lado a otro un barco, cuyos tripulantes llevan cuatro días sin acceso a comida, agua y atención médica.
También hay versiones contradictorias sobre la situación en la que se encontraba el barco cuando fue hallado por la guardia costera el viernes.
Medios locales aseguran que los migrantes realizaron una llamada de socorro tras quedar varados por las condiciones climáticas adversas para la navegación, mientras que la guardia costera explicó que no hubo ningún llamamiento de emergencia, sino que recibieron información sobre la ruta del barco y lo interceptaron.