Precisamente, ésta ha sido una de las cuestiones más polémicas de la LXVIII Reunión Interparlamentaria entre la UE-EEUU, que ha reunido a representantes del Parlamento Europeo y del Congreso de Estados Unidos en el Senado, con el objetivo de intercambiar posturas en materia de política exterior y cooperación bilateral, entre otros.
De hecho, el ministro español de Asuntos Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, que el sábado intervino en la reunión, y dos representantes del Gobierno de EEUU discreparon acaloradamente, según han explicado algunos de los presentes, por la postura española, más partidaria de flexibilizar la política exterior con Cuba.
Este incidente se produjo también después de que el ministro fuera recibido, en la sala donde se estaban celebrando las jornadas, con un cartel en el que se podía ver fotografías de varios presos cubanos.
El congresista republicano Mario Díaz-Balart se refirió ayer a esta cuestión para denunciar que el ministro, con su intervención –en la que explicaba la postura española respecto a Cuba–, “rompió todas las normas diplomáticas”, hecho que, según dijo, llegó a darle “un poco de vergüenza ajena”.
No obstante, y después de subrayar las discrepancias que mantienen ambos países respecto a Cuba, Díaz-Balart restó importancia al incidente porque en el fondo, añadió, España y Estados Unidos comparten el mismo fin: “La llegada de la democracia a la isla”.
Por ello, confió en que la Unión Europea mantenga, el próximo 14 de junio en Bruselas, la misma la postura que ha tenido con la isla en los últimos 13 años. De ser así, prosiguió el político, la posición europea se verá en EEUU “como un paso de solidaridad con el pueblo cubano, y no con el régimen cubano”.
Por su parte, la eurodiputada socialista María Badia, por su parte, opinó que la postura de Díaz-Balart sobre este asunto había sido un poco demagógica y propagandística, y lamentó que la defendiera en un foro que, en su opinión, no era el adecuado.
Respecto a la reunión del próximo 14 de junio, ha señalado que, a pesar de que la propuesta española de “repensar” la política con Cuba no cuenta con el apoyo del PE, “vale la pena insistir en ella, porque cuando se tienen convicciones fuertes (sobre un asunto), hay que tratar de impulsarlas”.
El parlamentario del PP Francisco Millán Mon ha señalado que su conclusión es que todos en el fondo buscan “el objetivo último del imperio de la libertad, del Estado de derecho y de la democracia, aunque sean divergentes los caminos y las posiciones para llegar a ese fin”.
En su opinión, un cambio en la posición común de la UE podría ser equivocado porque se podría entender como una concesión del Gobierno cubano a cambio de nada.
Ambas delegaciones han aprobado una declaración conjunta, con la que han puesto fin a la LXVIII Reunión Interparlamentaria, en la que, entre otras cosas, se apuesta por intensificar el diálogo entre los parlamentarios europeos y de Estados Unidos.
En ella también se refieren al carácter global de la crisis y sus efectos, defienden la necesidad de estabilizar la situación en los Estados miembros y en la Eurozona, y apuestan por coordinar acciones comunes.
