La Guardia Civil ha detenido a un vecino de La Zubia (Granada), de 43 años, como presunto autor de un delito contra la salud pública por cultivo y elaboración de droga y otro de simulación de delito.
Denunció el pasado martes, día 12 de noviembre, un falso robo con fuerza en las cosas en el interior de su domicilio para, al parecer, resarcirse de otra sustracción que sí que había sufrido ese mismo día de una plantación de cannabis sativa, informa el Instituto Armado en una nota.
En su denuncia en el Puesto de la Guardia Civil de La Zubia el detenido narró que había llegado a su casa y se había encontrado que habían reventado la cerradura de la puerta, que dentro estaba todo revuelto y que los ladrones le habían sustraído dinero, joyas y electrodomésticos, entre ellos un frigorífico y un lavavajillas que luego se ha demostrado que no existían.
Cuando los agentes del Área de investigación de la Guardia Civil de La Zubia hicieron la inspección ocular en la vivienda supuestamente asaltada, comprobaron que efectivamente la puerta había sido reventada. Sin embargo, cuando llegaron a la cocina, en el hueco en el que supuestamente estaba el lavavajillas no había indicio alguno de que allí hubiera habido electrodoméstico alguno: de hecho el desagüe seguía tapado con silicona.
En la vivienda, además, los agentes encontraron restos de tierra y de cannabis en el piso y en un patio interior. Y por último, comprobaron que el trastero que hay en dicho patio seguía cerrado con su candado, lo que resultaba algo extraño si la vivienda había sido asaltada; y mucho más cuando el denunciante dijo no tener la llave para abrirlo.
Después de insistir en la incongruencia entre lo denunciado y lo observado en la inspección ocular, el ahora detenido acabó confesando que la denuncia era falsa y consintió en abrir el trastero.
En el trastero los guardias civiles de La Zubia encontraron los electrodomésticos supuestamente sustraídos; y también seis plantas de cannabis sativa puestas a secar y las macetas que presumiblemente habían contenido las plantas que le habían sustraído al detenido.
En un registro posterior realizado en su domicilio, la Guardia Civil encontró un tarro de cristal en la cocina que contenía dos kilogramos de marihuana.
