La delegada territorial de Turismo, Regeneración, Justicia y Administración Local en Málaga, Nuria Rodríguez, ha visitado hoy Jimena de Líbar, uno de los 37 municipios de menos de 1.500 de la provincia que ha recibido ayudas de la Junta para proteger a sus vecinos ante el COVID-19. En concreto, la localidad cuenta con 9.590,65 euros para la limpieza y desinfección de sus calles y para dotar de mascarillas y equipos de protección a sus alrededor de 400 vecinos, entre los que afortunadamente no se ha registrado ningún contagio.
Rodríguez se ha reunido con el alcalde de Jimena, Francisco Javier Lobo Caballero, y ha conocido de primera mano el destino de estos fondos transferidos en abril por la Dirección General de Administración Local al Ayuntamiento, con los que la Junta “ha querido estar cerca de los municipios más pequeños y con menos recursos” para ayudarles a afrontar la crisis sanitaria. 
Con este dinero, el Ayuntamiento ha podido contratar a una persona para el reparto de mascarillas así como la limpieza desinfección en días alternos de sus calles, que aún mantienen.
Además, la delegada ha visitado con el alcalde los proyectos que se están ejecutando con cargo al Plan de Empleo Agrario (PFEA) correspondiente a 2019.
La Junta financia con 19.625,74 euros los materiales de las obras que está acometiendo el consistorio correspondientes a este plan basado en la cooperación entre administraciones para mejorar los servicios municipales, crear empleo en el mundo rural y luchar contra la despoblación.
Así, gracias al PFEA, la localidad ha adecentado los caminos rurales y reformado un antiguo lavadero en el que se instalará una fábrica de miel  mermelada. La delegada ha destacado que se trata de una iniciativa que “creará empleo y actividad económica en la localidad”.
Con las ayudas del PFEA también han promovido un parking para autocaravanas, “lo que contribuirá a potenciar el turismo de interior en una modalidad que está en auge al ser percibido como más seguro tras el COVID”.
El parking se ubica junto al camping Villa Sandía, de gran fama por sus divertidas cabañas. La delegada ha visitado este singular alojamiento que ha realizado mejoras gracias a las subvenciones a emprendedores que concede la Consejería de Turismo. 
El establecimiento, que está orientado al segmento familiar, cuenta también con el distintivo ‘Andalucía Segura’ para ofrecer las máximas garantías a sus visitantes ya que “este verano la seguridad será clave para la reactivación de un sector que es el motor de la economía andaluza como es el turismo”.
Rodríguez ha detallado que este distintivo, que es una iniciativa pionera impulsada por la Consejería que dirige Juan Marín, se descarga de manera voluntaria y gratuita y ha invitado a las empresas del sector a conseguirlo “porque se hace de manera sencilla y eso ayuda y mucho a conseguir esa imagen de solidez, de tranquilidad y de seguridad que necesitamos darles a nuestros visitantes ahora y que sin duda contribuye a reforzar nuestra percepción como destino seguro”.