Esta madrugada, poco antes de las cinco de la mañana, vecinos de la calle Amapolas daban aviso a la Policía de que un vehículo de grandes dimensiones había impactado contra un total de once vehículos estacionados en dicha calle, provocando numerosos y graves daños. La Policía Local acudió a la zona para encontrarse con una escena dantesca: los daños de los vehículos eran de gran importancia, llegando a destrozar en su huída incluso tanques de combustible, y dejando la calle llena de restos metálicos y gasolina, además de los coches destrozados.
Gracias a los vecinos, se pudo saber que el causante de los destrozos había sido un vehículo todoterro tipo 'pick-up' de color negro, que en el lance había perdido incluso una rueda. A pesar de eso, el vehículo trató de huir de la escena del suceso, intentando al parecer llegar a la Base Naval puesto que era conducido por una norteamericana en estado de embriaguez. Fue a la altura de la parte trasera de la estación de autobuses cuando la Policía consiguió darle alcance, cuando trataba de marcharse del vehículo. A la zona del suceso acudieron además Protección Civil y Policía Nacional, dado el enorme destrozo provocado por la conductora. La grúa municipal ha tenido que acudir también para despejar la calle y devolverla a la normalidad.