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San Fernando

Guerra abierta de vecinos hartos de ruido y orines a los bares del centro

Los vecinos de las calles Las Cortes y Cervantes pretenden crear una asociación para exigir que se tomen medidas ante las grandes concentraciones de clientes de dichos establecimientos.

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  • Foto de un vecino. -

“Estamos ante una situación insostenible”, eso es lo que declara un vecino del centro, que prefiere guardar el anonimato ante represalias, pues ya es difícil la situación que sufre con una familiar enferma que se ve afectada por esta situación.

La calle Las Cortes ha visto en los últimos cuatro años un crecimiento en el número de establecimientos de hostelería. Sólo había un restaurante, transformado posteriormente en bar cafetería, y otro bar cafetería que no ocasionaban las consecuencias de ahora.

Las primeras en saltar a la palestra, y sólo por un día a la semana y al año, fueron las hermandades, al estimar que el clima de la calle no se corresponde con el propósito de una estación de penitencia. Pero detrás de eso había una larga lucha jurídica de vecinos por salvar su derecho al descanso.


Aquello fueron las primeras denuncias, que han llegado hasta el Tribunal de la Unión Europea, pero eso no amilanó a nuevos emprendedores, hasta el punto de que en la calle Las Cortes, en el tramo de Plaza del Rey a General Serrano, hay nada más y nada menos que 7 bares con terrazas.

Un peligro añadido

Los vecinos denuncian las molestias que sufren, que no son sólo ruido de concentraciones de público. Aseguran que es tal la concentración de personas y las colas en los aseos, que “muchos terminan por hacer sus necesidades en la calle”, asegura.

De hecho, tienen fotografías de todo lo que denuncian a las puertas de su casa. Pero van a más. El hecho de que la calle Las Cortes se corte al tráfico y se llene de mesas y sillas hace temer lo peor a los vecinos, pues entienden que no hay sitio para los vehículos de urgencias.

Se preguntan, ¿qué pasará si algún vecino enfermo necesita urgente una ambulancia o se produce un incendio?. Cuestionan por el paso de los vehículos de urgencias y no entienden cómo el Ayuntamiento permite esta situación.

Señalan que desconocen si los decretos de autorización de terrazas contempla el espacio libre para el publico y los vehículos de urgencias o no. Lo que sí saben, es que la proliferación de bares ha provocado situaciones inimaginables en el centro. Un vecino denuncia que con ocasión de las obras de la calle San Diego y el corte de las calles Las Cortes y Cayetano del Toro, ha llevado a aparcar coches en plena calle Cervantes.

Dicen que de los mismos coches se sacan botellas de alcohol, que se mezclan con lo que compran en los bares y refuerzan su denuncia, en el incumplimiento de la Ley 7/2006 de la Junta de Andalucía, porque entienden que en su tramo de calle no hay bares con derecho a poder montar una terraza.

Vía de evacuación

El nacimiento de la nueva asociación de vecinos del centro, que no del Casco Histórico, pues ven que su problema no ha sido tratado por esta entidad, se debe también a que según manifiestan, “la calle Cervantes, en sus dos tramos desde calle Las Cortes a calle Real y calle Las Cortes a calle Cayetano del Toro, fue designada como vía de evacuación en caso de altercado o situaciones críticas”.

Denuncian asimismo, la colocación de reposavasos en la fachadas. Tablas que suponen un peligro para los pequeños que caminan por la acera. Para los vecinos, se trata de situaciones que van a más y por eso trabajan para crear una asociación de vecinos que luche contra la indefensión que sufren con el ruido y la suciedad que ocasionan las concentraciones de personas, sobre todo durante los fines de semana desde primeras horas de la tarde.

Los que se sienten afectados por esta situación que están soportando hablan de familiares octogenarios que necesitan de un descanso y un cuidado que se ve roto por el ruido y concentración de público fuera de las propias terrazas de los bares. Una situación agravada  por las zambombas.

Que se tomen medidas

La situación resultan tan insostenible para los vecinos, que algunos con posibilidades económicas prevén cuando hay zambombas, aniversarios o conciertos para irse de su casa a otra. Les impide el descanso, poder estudiar de cara a un exámen importante y todo ello después de un importante sacrificio por tener una casa en el centro.

Los vecinos no entienden el ruido que existe en la calle hasta altas horas de la madrugada, pero resulta que el Ayuntamiento ha dictado un decreto ampliando los horarios de ruido por entender que la celebración de una zambomba es algo tradicional. Y en efectivo lo era en patios de vecinos y sin altavoces.

Los avances para la constitución de una nueva entidad vecinal son notables y está claro que esta entidad viene como fruto de la concentración de bares en una calle que poco a poco está desplazando a la calle Real. Así lo dice el ambiente y las concentraciones de público.

Los vecinos denuncian que no sólo hay mesas y sillas. Sino que  también hay taburetes, mesas altas, cuatro bidones metálicos que sirven de mesas, calentadores de botella de butano encendidos.

La situación ha generado la creación de una entidad, que hará que los vecinos no luche por sus intereses de forma individual, sino que sea la entidad la que defienda los intereses de calles como Las Cortes, Cervantes , San Diego de Alcalá, o Cayetano del Toro.

De momento, la Policía Local de San Fernando ya tiene constancia de la situación por las denuncias de unos y otros.

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