Es un dato más a tener en cuenta ahora que la Banda Sinfónica Municipal de San Fernando agoniza y se morirá si alguien no lo remedia. Y no se espera que lo remedien los que la apuntillaron por no saber torear en plaza ajena y dar capotazo al penúltimo toro que le salió. Porque la Banda Municipal ha salido de muchos problemas a lo largo de su cuarto de siglo, quizá porque al frente y enfrente había voluntad de arreglar las cosas.
El dato a tener en cuenta es que dos de las tres flautistas que actuaron este viernes en el salón de actos de la Escuela San José, que además es escuela de música cada vez con más prestigio, salieron de la Banda Municipal de San Fernando y ahora son un trío cotizado y reconocido. Lo que se ha dicho antes: el talento hay que remunerarlo y apoyarlo y la excelencia no es cuestión de coger un pito y hacer ruido.
Anemoi, que toma el nombre del viento en la mitología, surge de la necesidad de expresión y comunicación de tres jóvenes flautistas profesionales. Su pasión por la flauta las une para interpretar e investigar el repertorio de cámara dedicado especialmente al trío de flautas, así como también a estrenar obras de compositores actuales.
“El respeto, la fama y el amor del público gracias a su calidad, alto nivel y la gran profesionalidad que demuestran en el escenario, llevando al público de una obra a otra con gran entusiasmo, desde el primero, hasta el último aliento de música” no es una frase propagandística en su perfil de Facebook, sino una excelente realidad que se puede comprobar en el video que acompaña esta noticia.
Delia María Peña Núñez, Aurora Hernández Foncubierta y María J. Fernández Hernández son las tres mujeres que deleitaron con música de medio mundo al público que acudió a una de esas citas que se recuerdan siempre, que dejan con ganas de seguir escuchando y que pocas veces se tiene la oportunidad de escuchar en San Fernando.
