El centrocampista Nando Quesada, nacido en Sabadell, que tiene 25 años y ha actuado como cedido esta pasada temporada en el Atlético Sanluqueño, regresa al Elche, club al que pertenece. El futbolista catalán ha sido pieza clave en el equipo que primero dirigió Rafael Carrillo y después Abel Gómez, como lo demuestra el hecho de que actuó en 36 de los 38 partidos de Liga.
Agradezco es que la afición se portó muy bien conmigoPartió desde Sanlúcar hasta Cataluña en su vehículo particular junto a su pareja. La última vez que estuvo en su tierra fue en Navidad, de ahí que no viera a su familia desde entonces.
Resalta que “pienso que durante la temporada fui de menos a más. El cambio de entrenador hizo mucho porque era dos formas distintas de fútbol. La anterior no me beneficiaba por mi forma de juego”.
Tiene claro que “nunca me arrepentiré de haber jugado en el Atlético Sanluqueño. Me dijeron en el Elche de que no iba a tener los minutos suficientes en Segunda División A y después surgió la cesión al Atlético Sanluqueño. Lo que quiero es jugar en la categoría más alta posible”.
Sí que se sintió aliviado al lograr la permanencia de manera directa: “Una promoción por no bajar pasa factura. No sé que hubiera ocurrido. Es angustioso jugarte toda una temporada en 180 minutos”.
Nando Quesada no pudo lograr algún gol en la Liga pero sí que participó en muchos. Sobre su futuro señala que “el destino dirá en qué equipo jugaré. Yo nunca cierro una puerta ni por supuesto la del Atlético Sanluqueño. ¿Quién me iba a decir que tendría como compañero en la plantilla a Dani Güiza?. Eso es lo bonito que tiene el fútbol”.
Ha residido en Sanlúcar por espacio de nueve meses. Antes de marcharse tuvo la ocasión de conocer una de las grandes fiestas que tiene la ciudad, la Feria de la Manzanilla. Dice que “la afición se portó muy bien conmigo. Fue un jugador más”.
