La Policía Nacional ha detenido a un total de cinco personas que supuestamente cometían robos con fuerza en vehículos estacionados en centros comerciales de Alcalá de Guadaíra (Sevilla) y que utilizaban un inhibidor de frecuencia de radio para neutralizar el cierre centralizado de los coches, poder acceder al interior de los mismos y sustraer los efectos sin necesidad de forzarlos.
Según ha informado la Policía en un comunicado, tres de los cinco detenidos fueron interceptados por los agentes al ser sorprendidos 'in fraganti' cuando presuntamente cometían robos en lo vehículos de los clientes que se encontraban estacionados en un centro comercial del municipio.
Los agentes conocieron los hechos a través de algunas denuncias recibidas por ciudadanos que supuestamente habían sido víctimas de un robo con fuerza en sus vehículos, de los que les habían sustraídos varios efectos, entre ellos, algunas de las compras que realizaban en el referido centro comercial.
Así, la Policía ha señalado que dado que los vehículos no presentaban signos de forzamiento alguno y que sus propietarios aseguraban haber activado el cierre centralizado tras dejarlo estacionado en el aparcamiento del centro comercial, los investigadores sospecharon que los presuntos delincuentes podrían haber utilizado algún sistema de inhibición de radio para interceder la señal de cierre del vehículo y dejarlo abierto "a fin de sustraer los efectos que pudieran encontrarse en su interior con total impunidad".
Los agentes pusieron en marcha una investigación siguiendo esta hipótesis y que dio lugar a una serie de actuaciones policiales que permitieron la identificación de uno de los implicados en este tipo de robos, por lo que posteriormente se procedió a su detención.
De este modo, atendiendo a otros incidentes registrados anteriormente y a la información obtenida durante la investigación, los agentes sospecharon que podría haber más personas dedicadas a este tipo de robos y que pudieran seguir operando conjuntamente, por lo que continuaron las diligencias necesarias para la localización, identificación y detención de estos.
La detención de los otros tres sospechosos se produjo "gracias a la colaboración ciudadana", tras una llamada a la sala del 091 por parte de un ciudadano que manifestó haber visto a estos hombres supuestamente sustrayendo efectos de un vehículo estacionado en el parking del centro comercial.
Con los datos aportados por este ciudadano, una patrulla policial consiguió localizar al vehículo, en el que "circulaban dando vueltas sin rumbo" dentro del recinto del parking de este centro comercial, por lo que les dieron el alto policial ante "los indicios claros de una actitud sospechosa y debido a lo manifestado por el testigo de los hechos", señala la nota.
Así, ha indicado que tras un cacheo superficial de los ocupantes del vehículo y un registro del mismo, los agentes encontraron en la guantera un inhibidor de frecuencia que, según las propias manifestaciones de estos individuos, habían utilizado para impedir el cierre centralizado de otros vehículos que se encontraban estacionados en el parking, llegando a acceder a tres de ellos.
Igualmente, la Policía ha apuntado que, como se ha podido saber a tenor de las investigaciones, con este 'modus operandi' estos individuos se hacían supuestamente con los efectos que los usuarios del parking dejaban en el interior sin necesidad de forzar las cerraduras, tales como productos informáticos o de electrónica, que llegaban incluso a alcanzar un valor superior a los 2.000 euros.
La investigación se cerró con la detención de otro individuo que presuntamente había cometido robos mediante este procedimiento delictivo, "como así se pudo dilucidar de las distintas diligencias y que podría tener relación con los anteriores arrestados dado que habían sido vistos juntos merodeando la zona".
Los detenidos, de los que sólo uno de ellos contaba con antecedentes policiales previos por delitos de distinta naturaleza, ya han sido puestos a disposición de la autoridad judicial.