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El presupuesto de 2016, en el aire, y el de 2017, también

Participa presiona para repetir el pleno y que cesen a Castreño mientras Espadas acatará la sentencia notificación en mano

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La no admisión a trámite del recurso del Ayuntamiento contra la sentencia del TSJA que anula la aprobación del presupuesto de 2016 deja en el aire las cuentas del pasado año, aún vigentes, pero también afecta a las futuras, las del 2017, aún no aprobadas, un “vacío presupuestario” que ha puesto en evidencia con dureza el PP mientras Participa exige la repetición del pleno para subsanar el error, que se cese a Carmen Castreño y que el PSOE pague todos los recursos. El alcalde, Juan Espadas, que insiste en que no valorará nada hasta no recibir notificación oficial, asegura que acatará la sentencia, mientras critica con dureza la postura del PP en la negociación de los presupuestos para este ejercicio.

Un pleno “casi simbólico”, como reconoce el edil de Participa Julián Moreno, podría por dar solventada la situación en la que se encuentra el Ayuntamiento, con unas cuentas, las de 2016, cuya aprobación fue anulada por vulnerar los derechos fundamentales de los concejales de Participa, que dicen no quieren causar perjuicio alguno a la hacienda local, más en puertas de la aprobación de los Presupuestos de 2017.

No es sólo repetir el pleno lo que pide Participa. También exige que se cese a Carmen Castreño como presidenta del Pleno, reprobada por mayoría, y que el PSOE pague todos los recursos que ha interpuesto el Ayuntamiento. Son “los tribunales” los que han dicho que “Espadas está equivocado” y el dinero que se ha gastado “obcecadamente” el Consistorio lo debe pagar el PSOE, “al menos el gasto del despacho de abogados externo, unos 30.000 euros, ya que fue una cabezonería”.


“Esto es para nosotros la victoria”, decía Moreno asegurando que lo que tendría que hacer Espadas es acatar la sentencia y admitir que “se ha equivocado”, en vez de “escudarse en que el Ayuntamiento no ha recibido la notificación” del Supremo.

De Espadas al PP

Y eso es lo que repitió ayer Espadas, que no van a entrar a valorar la resolución hasta que no les sea notificada, un retraso que ve “poco serio”. Eso sí, sin valorar qué consecuencias tendrá, ha dejado claro que, comparta o no la sentencia, la acatará.

Quien le ha exigido “responsabilidades políticas” por la situación de “vacío presupuestario” es el portavoz adjunto del PP, Beltrán Pérez, que considera que “el varapalo del Supremo y la intransigencia de Espadas en la negociación este año nos lleva a una ciudad sin rumbo, sin proyecto y sin presupuesto”.

“Sevilla no tiene presupuesto porque el vigente, el de 2016 prorrogado, ha sido declarado nulo y el de 2017 ni sabemos cuándo se aprobará inicialmente”, decía Beltrán recordando que es la primera vez que en la historia del Ayuntamiento de Sevilla que un juez anula su presupuesto por irregularidades en su aprobación, criticando además el gasto -20.570 euros- en la asesoría externa.

“La actitud del alcalde con el Grupo Popular en el presupuesto actual, manteniéndonos al margen y dando la espalda a la mayoría real, es una muestra más de la prepotencia que también mostró el año pasado con el resto de los grupos y que ha avalado ahora también el Supremo, confirmando la nulidad del presupuesto vigente prorrogado”, ha asegurado.

“Varapalo” en el IMD

Lo cierto es que el presupuesto de 2017 sigue aún en el aire y en espera de que el interventor dé su visto bueno al informe tras la incorporación de enmiendas, aunque ya han empezado las dificultades en algunos organismos municipales, como el Instituto Municipal de Deportes (IMD), donde la inclusión de la Relación de Puestos de Trabajo que el Pleno rechazó ha provocado el voto en contra de PP, Participa e IU, además de la abstención de Ciudadanos, lo que ha sido calificado por los populares como un “nuevo varapalo” a Espadas.

Y es en los populares donde el propio Espadas ha descargado toda la responsabilidad para no encontrar un punto de acuerdo en las negociaciones presupuestarias. Según el alcalde, estas cuentas “han costado mucho trabajo”, no por problemas de “gestión, de lentitud o de torpeza, sino de encaje de una multitud de propuestas y de enmiendas de muchos partidos”.

Ha puesto como ejemplo el trabajo de una modista, donde cada uno “quiere poner la manga o la sisa a su modo, mientras que el gobierno tiene que cuadrarlos con un proyecto coherente que ha de tener el visto bueno de Intervención, si no lo podíamos haber tenido hace un mes”.

Una vez aprobado, ha anunciado que “valorará las actitudes y responsabilidad política del PP en todo esto”. Así, valorará a cada uno de los grupos y pedirá a la ciudad que tenga “muy en cuenta la catadura y la responsabilidad política del PP”. “Ya daré más datos y con un mayor análisis cuando el presupuesto pase por el Pleno”.

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