Expertos del Instituto de Medicina Legal de Málaga han extraído restos biológicos para analizar el ADN del cadáver de una mujer que está enterrada desde 2010 y cuyos datos coinciden con el de una sevillana que lleva desde entonces intentando demostrar a la administración que sigue viva.
Se trata de una exhumación que ha autorizado un juzgado malagueño en el cementerio Parcemasa San Gabriel de Málaga, en el proceso iniciado para que la vecina de Alcalá de Guadaíra (Sevilla) Juana Escudero pueda "demostrar" que está viva, y mediante el cual ha sido extraído material para analizar el ADN de un fémur y el pelo de la fallecida, han dicho a Efe fuentes de la investigación, que han detallado que el cadáver se encontraba en buen estado para extraerle ADN.
En los trabajos han participado, además de operarios del cementerio, un representante de la administración de Justicia y un médico forense, y el ADN extraído se va a comparar ahora con el de la propia Juana Escudero y un sobrino de ella, una vez que los analice el Instituto de Toxicología en Sevilla, a donde han sido enviados desde el Instituto de Medicina Legal de Málaga.
Salvo retrasos, en algo más de una semana se podrían tener los resultados de la investigación del ADN para determinar si la persona que está enterrada en el nicho del cementerio de Málaga guarda relación de parentesco con Juana Escudero.
Se trata de un proceso en el que Escudero está inmersa desde 2010, cuando murió la mujer enterrada en el nicho, y cuyo nombre coincide con el de esta vecina de Alcalá, lo que le impide realizar gestiones administrativas desde hace siete años al constar como fallecida.
Las primeras investigaciones apuntan a que se ha podido llevar a cabo un caso de usurpación de identidad por parte de la pareja de la fallecida, que habría usado los datos de Escudero cuando la mujer falleció repentinamente, por motivos que se investigan.
Juana Escudero cree que ha podido ser confundida con una hermana con la que no tiene contacto y no sabe dónde se encuentra, pero no tiene relación alguna con la provincia de Málaga ni con nadie que pueda coincidir en datos con la persona que está enterrada en el nicho.